Comienza el juicio contra un guardia civil destinado en Almadén acusado de hacer favores relacionados con su puesto de trabajo
La Fiscalía pide para él quince años y seis meses de prisión por cohecho y falsedad documental, entre otros delitos. También se sientan en el banquillo su cuñado y otras cuatro personas
Almadén
La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha acogido este viernes la primera sesión del juicio con jurado por la operación 'Cinabrio', que sienta en el banquillo a cinco acusados, uno de ellos un agente de la Guardia Civil, acusados de delitos de cohecho, revelación de secretos y falsedad documental.
Esta operación, puesta en marcha por Asuntos Internos de la Guardia Civil entre 2020 y 2021, acabó con la detención de seis guardias civiles en Almadén, su comarca y Puertollano, de los que finalmente solo uno resultó imputado, y que casi tres años más tarde de su detención deberá responder por los delitos de los que se le acusa.
Junto al guardia civil comparten banquillo en la sala su cuñado y tres particulares más, supuestamente relacionados con favores que les hacía el agente a cambio de pequeños regalos. La Fiscalía ha solicitado hoy la pena de 15 años y 6 meses de prisión para el agente de la Guardia Civil de Almadén acusado de hacer favores relacionados con su puesto de trabajo a cambio de pequeños regalos como la invitación a una montería, un jamón o un guarrillo. Tras su detención en noviembre de 2021, se le acusa de cohecho, revelación de secretos y falsedad documental junto a su cuñado y otras 4 personas más.
La vista ha comenzado hoy con las conclusiones provisionales donde la defensa de cinco de los acusados ha pedido la libre absolución de sus defendidos al considerar que el agente no recibió regalos a cambio de sus supuesto favores y que la acusación de la Fiscalía se basa solo en meras conjeturas que nada tienen que ver con las realidad y que no son constitutivas de delito.
Solo uno de los acusados, arrepentido por los hechos, ha reconocido el delito de falsedad documental señalando en su escrito que el agente del Instituto Armado firmó una declaración jurada ficticia con su nombre afirmando que no conducía un quad que había sido denunciado por conducción temeraria.
La defensa pide la libre absolución de todos los acusados
El juicio ha comenzado una vez que se ha elegido a nueve miembros del tribunal del jurado y a los dos suplentes, que deberán de decir sobre los hechos por los que van a ser juzgados estas personas, y para la que la Fiscalía y la Abogacía del Estado piden penas de 15 años y medio de prisión para el guardia civil; seis años y medio de prisión para su cuñado, y penas de entre seis y dos años de prisión para el resto de los tres acusados, puesto que otro acusado más ha fallecido antes de la celebración del juicio.
La sesión ha comenzado con la lectura de los escritos de acusación y defensa de las partes, que en el caso de las defensas mantienen la inocencia de sus clientes y piden para ellos la libre absolución, al considerar que los delitos por los que son acusados sus clientes “no han existido”.
El juicio está previsto que continúe el lunes con los alegatos iniciales de las partes, tras lo cual tendrá lugar el interrogatorio de los acusados.
Comprobar los datos de una matrícula a cambio de una invitación de caza
Las fiscalía recoge en su escrito de conclusiones provisionales cómo el agente accedía al Sistema Integrado de Gestión Operativa, Análisis y Seguridad Ciudadana (SIGO) para comprobar los datos de una matrícula, a cambio de una invitación a una espera de jabalíes.
Favores por los que recibió un jamón y fue invitado a comer un 'guarrillo', según las conversaciones telefónicas intervenidas por los agentes en la investigación interna y que constan en el escrito de acusación de la fiscalía.