¿Cuáles son las tres preocupaciones para el comercio exterior de Castilla La Mancha ante los aranceles de EEUU?

Toledo

Un Tribunal de Estados Unidos acaba de declarar ilegales la mayoría de aranceles impuestos por el presidente Donald Trump. Sin embargo, Apelaciones ha anunciado que mantendrá en vigor los gravámenes hasta el 14 de octubre, fecha que permite a la administración estadounidense presentar alegaciones.

Esta misma semana Bruselas ha propuesto eliminar los aranceles a los productos industriales estadounidenses y dar un acceso preferencial al mercado comunitario a una serie de productos pesqueros y agrícolas no sensibles de Estados Unidos. De ello hemos hablado en Hora 14 Castilla-La Mancha con el Director Territorial del ICEX, Pedro Antonio Morejón. La principal característica del acuerdo, dice, es que es desequilibrado. Pero "es mejor un mal acuerdo que un no acuerdo" porque la incertidumbre es la peor herramienta para el comercio exterior.

El primer punto a estudiar el impacto directo sobre lo que la región exporta a EEUU. En un segundo escalón, quizá más interesante, preocupa cómo va a afectar esta política arancelaria a grandes mercados como los asiáticos. El motivo es que Asia está siendo para Castilla La Mancha el mercado más pujante, con crecimientos del 150% en lo que va de año. La UE tendrá que asumir una entrada masiva de producto chino que no va a vender en EEUU. El tercer punto a tener en cuenta es el impacto de los aranceles en nuestros principales compradores: nuestros socios europeos, como Francia, Alemania o Italia. "Cómo mantener nuestras ventas allí cuando ellos están tan expuestos, por ejemplo, con los componentes de automoción" Las ventas de Castilla La Mancha en estos países miembros están teniendo crecimientos mínimos así que la nueva coyuntura puede tener una gran afectación.

Preguntado por tres de nuestros pilares agroalimentarios: queso, vino y aceite, la repercusión es muy diferente. Morejón cree que los grandes productos de marca como el queso manchego tendrán unas dificultades muy leves porque "prima la calidad, la excelencia, algo que no puede compensar el abaratamiento" El consumidor americano puede asumir un sobrecoste. En el sector del aceite tampoco parecen excesivamente preocupados por el mismo motivo. Allí es un producto "delicatessen" y su margen de encaje es muy superior. Pero el vino, que se quiso sacar del acuerdo, sin éxito, sí puede sufrir más y el 15% impuesto puede lastrar su competitividad.