Barro y madera: la belleza de las técnicas antiguas que dieron forma a Cuenca
Una exposición con planos, fotografías y maquetas que reivindican la arquitectura tradicional conquense

Barro y madera: la belleza de las técnicas antiguas que dieron forma a Cuenca
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Cuenca
El salón de plenos del Ayuntamiento de Villar del Humo acoge la exposición La belleza de las técnicas antiguas, una muestra que recorre los fundamentos de la arquitectura tradicional de la provincia de Cuenca a través de planos, dibujos, fotografías y maquetas.
Impulsada por el maestro e investigador Emilio Guadalajara junto a Moisés Heras, la exposición parte de un trabajo de la arquitecta Carmen Cabrerizo y reivindica la sabiduría constructiva de materiales como la piedra, el barro, la madera o la cal, con los que generaciones enteras levantaron casas, templos y espacios comunitarios.
“La idea es que llegue a cualquier pueblo, da igual si es grande o pequeño, lo importante es que todo el mundo pueda conocer estas técnicas”, explica Guadalajara. En cada localidad, además, se suma un panel con ejemplos de arquitectura tradicional propios, lo que convierte la muestra en un proyecto vivo y colaborativo.

Casa en Santa María del Val (Cuenca).

Casa en Santa María del Val (Cuenca).
La sabiduría de lo sencillo
Entre las técnicas más representativas que aún sobreviven en los pueblos conquenses, Guadalajara destaca la piedra seca, declarada Patrimonio de la Humanidad. “La piedra seca es colocar piedra sobre piedra utilizando como argamasa, en el mejor de los casos, el barro. No se empleaba ni yeso ni cemento”, recuerda.
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Pero no es la única. La mampostería, tanto en basto como con cal y cemento, forma parte de la identidad constructiva de muchos municipios. Incluso materiales humildes como el yeso han demostrado su vigencia.
“El yeso es un material sencillo que cualquiera podía obtener en un yesar. Y sin embargo, ofrece una amortiguación térmica que el hormigón no consigue”, asegura el investigador, recordando cómo un estudio en Torrejoncillo del Rey demostró diferencias de hasta 15 grados entre el interior y el exterior de viviendas tradicionales.
Paridera adosada a una dolomía en Valdecabras (Cuenca).
Paridera adosada a una dolomía en Valdecabras (Cuenca).
Ventanas pequeñas, muros gruesos
La exposición también invita a reflexionar sobre la lógica detrás de la arquitectura antigua. En una provincia marcada por el frío, los muros gruesos y las ventanas pequeñas eran fundamentales. “No había cristal en muchas casas, así que las ventanas pequeñas ayudaban a que entrara menos frío”, explica Guadalajara.
La madera, especialmente la de pino negral de los Montes Universales, completaba la ecuación. “Qué mejor estructura para suelos, vigas o puntales que la madera. En muchos pueblos aún se conservan cámaras y tejados con estructuras intactas”, detalla.
Entre las curiosidades destaca la técnica de las colodras, vigas insertadas en muros de adobe o piedra pobre para darles consistencia. También los canecillos y balconadas de lugares como Cañete, que prolongaban las casas hacia la calle, forman parte de este legado.

Callejuelas con arquitectura popular en Mira (Cuenca). / Fernando Carreras (ecoexperience.es)

Callejuelas con arquitectura popular en Mira (Cuenca). / Fernando Carreras (ecoexperience.es)
De la modernidad al redescubrimiento
Guadalajara recuerda que durante décadas muchas de estas construcciones fueron consideradas “pobres” o “anticuadas”. “Hubo un momento en que se quiso dar un salto a la modernidad y se cubrían las fachadas de piedra seca con cemento para que no parecieran pobres”, explica.
Sin embargo, la sensibilidad ha cambiado. Hoy muchas personas valoran la autenticidad de estas construcciones y optan por recuperar sus elementos originales. “Es mejor no esconder nuestras raíces, sino exhibirlas. Eso es lo que da personalidad a los pueblos”, defiende el investigador.

Maqueta de una paridera y del pozo de la Tía Cirila de Las Majadas creadas por Emilio Guadalajara que se pueden ver en la exposición.

Maqueta de una paridera y del pozo de la Tía Cirila de Las Majadas creadas por Emilio Guadalajara que se pueden ver en la exposición.
Un legado sostenible y de futuro
Más allá de la estética y la memoria, las técnicas tradicionales ofrecen claves para la sostenibilidad actual. Desde la eficiencia térmica del yeso hasta el aprovechamiento de recursos locales, la arquitectura antigua se revela como un modelo válido para la rehabilitación y para atraer vida a los pueblos en riesgo de despoblación.
“Son detalles importantes que siempre se pueden poner en marcha. La arquitectura tradicional tiene mucho que enseñarnos todavía”, concluye Guadalajara.

Maqueta de una casa de resineros creada por Emilio Guadalajara.

Maqueta de una casa de resineros creada por Emilio Guadalajara.
La exposición en Villar del Humo
Tras pasar por localidades como Tragacete y Masegosa, la exposición llega ahora a Villar del Humo, donde permanecerá durante los próximos días. Además de su patrimonio rupestre, el municipio aportará fotografías y ejemplos de arquitectura tradicional propios, enriqueciendo un proyecto que sigue creciendo en cada parada.
Con esta itinerancia, La belleza de las técnicas antiguas no solo rescata técnicas constructivas olvidadas, sino que también invita a mirar al futuro desde la sabiduría del pasado.

Paco Auñón
Director y presentador del programa Hoy por Hoy Cuenca. Periodista y locutor conquense que ha desarrollado...




