El pulso entre salarios y costes abre el calendario de negociación del convenio de la pizarra en Castilla y León
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Ponferrada
Arranca la negociación del convenio autonómico de la pizarra. Esta mañana ha quedado constituida la mesa de negociación y se ha fijado el calendario de diálogo con la patronal englobada en Apropicale y Apical, una agenda que tendrá continuidad el día 30 de mayo. Después del acuerdo alcanzado a nivel nacional, el texto que se desplegará ahora tiene ya de partida la dura tarea de cerrar el incremento salarial de cara a los tres próximos años.
Mano y sonrisa por delante en una negociación a la que UGT llegaba con la idea de acomodar el poder adquisitivo de los trabajadores a la subida del salario a las condiciones económicas del momento, dicen Jorge Díez y Manuel Cuadrado.
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En Comisiones Obreras, su representante, Felipe Álvarez, traía sin embargo la cartera a rebosar de quejas. De hecho ya avanza que el sindicato hará una ofensiva con "denuncias a inspección dependiendo del texto que salga de esta negociación". Cree el sindicalista que además, sus siglas están siendo objeto de una especie de persecución que acaba con las listas de delegados en las empresas en las que se elaboran.
En el plano de la patronal, Apropicale no ven complicada la tarea que les queda mientras que los patronos de Apical consideran que será al menos difícil en la búsqueda de un equilibrio entre las peticiones salariales de los empleados y los gastos económicos que soportan las empresas por el aumento de precios de energía, carburantes, explosivos, reparaciones, fletes de exportaciones y logística.
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El convenio también asumirá la incorporación de la Reforma Laboral, una modificación que implicará por ejemplo el refuerzo de la contratación indefinida y la reducción de la temporalidad en un sector en el que, según Eliseo López, el índice de contratos estables es ya elevado pero en el que quedarán muy limitados, por ejemplo, los contratos denominados contratos de obra, a los que se recurría a menudo en el sector.
