Los riesgos de las consultas telefónicas: una mujer de 83 años diagnosticada de gripe sufría en realidad una peritonitis

Ávila

Una mujer vecina de Rasueros (Ávila) de 83 años lleva varias semanas ingresada en un hospital donde se recupera de una operación de urgencia por una peritonitis cuyos síntomas fueron confundidos con una gripe por el facultativo que la atendió de forma telefónica.

Este caso ha sido denunciado públicamente por Andrés Rodríguez, portavoz del PSOE en ese municipio. Según ha relatado la mujer comenzó a sentirse mal un domingo. Al día siguiente llamaron al centro de salud para pedir cita con el médico y allí les dijeron que ya les llamarían. Y efectivamente, esa mañana recibieron la llamada del facultativo de Atención Primaria quien, tras preguntar por los síntomas que tenía, le diagnosticó una gripe y le prescribió paracetamol y que bebiera mucho agua.

Unas horas después la familia tuvo que llevarla a urgencias al ver que empeoraba su estado. En el Hospital de Medina del Campo los médicos les dijeron que "venía con una peritonitis y que tenía prácticamente infectado todo". A las once de la noche entró en el quirófano.

Éste es un caso especialmente grave pero hay otras muchas situaciones que ponen en evidencia las dificultades en el medio rural donde la población está especialmente envejecida.

Andrés Rodríguez dice que la falta de transporte sanitario hace que los enfermos dependan de la buena voluntad de sus vecinos. Él mismo el pasado mes de septiembre tuvo que ayudar a su vecina trasladándola con su coche hasta el Centro de Salud de Madrigal de las Altas Torres. Una vez allí, tras esperar varias horas, les dijeron que "allí no podían hacer más" y le pidieron que él mismo la trasladara hasta el hospital más cercano, ubicado en la localidad vallisoletana de Medina del Campo.

Denuncian que hay menos consultas presenciales

A Rasueros, municipio con 168 personas censadas, el médico va a pasar consulta una hora y media dos días a la semana. Pero según Andrés Rodríguez eso es relativo porque "a veces no pueden, dado el volumen de trabajo que tienen porque esa Zona Básica de Salud está compuesta por ocho pueblos".

En otro municipio abulense, Sotalbo, con 230 habitantes, el alcalde se queja de que como consecuencia de la jubilación del médico de Atención Primaria que pasaba consulta allí tres días a la semana el SACYL ha informado de que a partir de ahora esa atención presencial se hará solo dos días. Juan Manuel del Nogal dice que los vecinos le preguntan a diario por qué se ha reducido la presencia del médico y no sabe qué decir porque a él, como alcalde, nadie le ha explicado nada. Igual que el resto de los empadronados en Sotalbo se enteró del cambio por una circular colocada en la puerta del consultorio médico.

Este problema va a ir en aumento porque en la provincia de Ávila porque uno de cada tres médicos de familia están al borde de la jubilación, según denuncia el diputado socialista Raúl Blanco. Dice que "la Junta de Castilla y León no apuesta por fidelizar a los médicos" con lo que no se cubren las plazas. Como consecuencia de ello hay una rotación continua de profesionales "lo que ha generado un clima de inseguridad entre los pacientes" y dificulta la relación de confianza que se establece con los médicos de Atención Primaria que son el primer escalón de la Sanidad.

"Solicitamos que se pongan de inmediato los medios necesarios para que la atención en los consultorios rurales no solamente se mantenga sino que, además, se mejore en la medida de lo posible", dice Raúl Blanco. Pide que la Junta de Castilla y León utilice "los diez millones de euros procedentes del Gobierno para reforzar la Atención Primaria y no a otras cosas que puedan interesar más a determinados partidos".