De puentes del Directo Madrid-Aranda-Burgos a infraestructuras sobre la que hacer puenting

Guadarrama

Si tienen amigos aventureros, o si lo son ustedes, pueden haber visto o estado presencialmente en uno o dos de los grandes puentes del Directo Madrid-Aranda-Burgos que se han reconvertido para lanzarse al vacío con todas las medidas y arneses de seguridad. Sí, para hacer puenting. Y es que en la Sierra de Guadarrama y concretamente en los términos de Rascafría y Buitrago, dos de las infraestructuras más 'potentes' de la que fue -y esperamos en un futuro vuelva a ser- nuestra vía, con tránsito ferroviario, se han convertido en la base de operaciones de empresas de aventura para realizar esta actividad en jornadas como los domingos.

Los aventureros saltan al vacío -en estos puente de 30 metros de altura- con varias cuerdas y arneses, en un salto de 20 a 25 metros y con varios monitores, tanto sobre la infraestructura como en la recepción de quien salta. Toda una experiencia repleta de adrenalina para cientos de intrépidos.

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Así, en cierto modo, se ha dado uso a infraestructuras que se encuentran abandonadas para el tránsito ferroviario, tras años sin ver pasar convoyes. La línea del Directo, sin mantenimiento pese a lo que pueda asegurar ADIF, sigue a la espera de comprobar si se retira la bateadora que quedó atrapada en el túnel de Robregordo. Una retirada que depende de un estudio del que poco se sabe, y que incumple en cualquier caso los plazos a los que se comprometió la ministra de Transportes Raquel Sánchez. En cualquier caso, siempre y cuando se cumpliera con la rehabilitación del túnel, ya en su día la Plataforma por el Directo advirtió que no garantizaría la reapertura de la línea. Y es que a la falta de mantenimiento de la vía ya anunciada, hay otros muchos túneles que también podrían estar afectados por el paso del tiempo y la falta de su respectivo cuidado.

Solo el tiempo dictaminará si tanta promesa incumplida y tantas enmiendas denegadas acaban convergiendo, finalmente, en un futuro digno para una infraestructura demandada a la par que negada a miles de vecinos.