Javier Ruiz Monge: "No podríamos llevar la vida actual de no haberse construido los pantanos"

Palencia

Javier Ruiz Monge ha presentado su libro de divulgación "Historia de los pantanos de Palencia: en memoria de las praderas sumergidas", un libro en el que ha estado 4 años trabajando, recopilando datos y fotografías que pudieran dar a conocer la historia de los cinco grandes pantanos de la provincia: Camporredondo, Ruesga, Compuerto, Cervera y Aguilar, cómo se construyeron, lo que supuso cada uno en su momento para los vecinos de las zonas afectadas, para su modus vivendi y lo que siguen significando a día de hoy. Asegura que sin estos pantanos no sería posible llevar la vida que llevamos hoy en día, su construcción ha traído innumerables beneficios, pero, también, supuso la desaparición de pueblos, cambios en los sistemas productivos de la época, la llegada de nuevas tecnologías muy avanzadas, pero, también muchos sacrificios para la gente de la zona. Unos sacrificios muy presentes en su obra.

En el capítulo relativo a cada pantano nos encontramos con una parte histórica y otra técnica, apoyada por muchos gráficos y dibujos y se incluyen códigos QR para el que quiera ampliar información con documentos de la época.

El primer pantano que se construyó fue el de Cervera, que entró en servicio en 1923. Camporredondo fue muy complicado ya que hubo que hacer una central eléctrica, una línea telefónica, un ferrocarril para traer la piedra de la cantera del Espigüete fue inaugurado en 1930 por el rey Alfonso XIII. Ambos embalses fueron impulsados por Abilio Calderón. Después fue el de La Requejada, con el hubo que inundar dos pueblos. En 1935 se encarga el proyecto de Aguilar, que se entrega después de la guerra Civil, pero fue necesario redactar uno nuevo, que es el que finalmente se ejecuta. El último en ejecutarse fue el de Compuerto.

Hubo proyectos para la construcción de otros 5 que, finalmente, no se llevaron a cabo. El del Valle de Pineda, que hubiera anegado gran parte de la pradera, el de Peña Caballera que se hubiera construido en la cola del de Aguilar y el de Olmos de Ojeda que no hubieran anegado localidad alguna. Si lo hubiera hecho el de San Mamés de Campos, caso de haber seguido adelante y que fue sustituido por el de Compuerto y el de La Cueza que también se hubiera llevado por delante algún municipio. El libro, recoge el ejemplo de Vañes, que actualmente se encuentra bajo el embalse de Requejada y como cambió de lugar a principios de la década de los 40.