De la puerta del Sol de Madrid, al Centro Cultural de Aranda

Aranda de Duero

Solo con escucharlo, jóvenes y mayores saben reconocer de sobra a Michael Jackson. Su legado artístico e irrepetible se fundió con su marcha, pero no se apagó. No lo hizo porque muchos siguen llevando su música y baile -y cómo no, su thriller- en las venas, porque son muchos los artistas que lo mantienen de alguna forma en vida, llevándolo hasta nuestro día a día.

Este sábado (19.30 horas) llega al Cultural Caja de Burgos Michael For Kids, un espectáculo de nivel que ayuda a revivir y disfrutar esos bailes y ritmos imposibles, pero enfocado a toda la familia. Porque los más pequeños "también conocen el Billie Jean cuando lo escuchan", dice Leo Jackson, el hombre de apellido artístico y nombre real que este sábado llega a Aranda de Duero para mover y sorprender a las familias.

"Michael for kids es un evento que estamos realizando para el público adulto y más joven. Es una presentación que hace incluso bailar a los más pequeños, a quienes subimos a bailar al escenario. Es un concierto completo, con sus cuentos, chistes, y su mecánica evolutiva, porque empezamos con shows de alto impacto y que requieren de una marcha y energía increíble en el baile que a la gente le gusta mucho", relata.

El recuerdo a Michael Jackson

"He estado en eventos, cumpleaños, bodas... Durante muchos años y en muchos países, 9 ó 10. En Madrid también he bailado en la calle, hasta que conocí a mi productor y me dijo que sacáramos a un Michael para niños, un espectáculo. Realmente a todos ellos les encanta, porque todos llevamos un Michael dentro. Hacemos literalmente un concierto suyo pero dirigido a los pequeños. Y por lo general, es un bonito espectáculo", cuenta Leo, rememorando cómo comenzó este show.

Lo más difícil de imitarlo

Fue un genio artístico pero, para quienes lo imitan, ¿qué es lo más difícil de 'igualar'? "Hay poco que sea fácil hacer de él. Ya nace siendo una estrella, y artísticamente lo más difícil son sus movimientos; hace magia con los pies, flota. Y que sea un artista tan completo, marcando toda una era, hace que esa magia también la transmitamos nosotros cuando nos presentamos", sentencia este Jackson, que no se llama Michael, pero que tiene una ilusión arrolladora por hacer disfrutar a quienes le ven. Y en eso, se parece mucho al grande e irrepetible que nos dejó en 2009.