Amor

Palencia

Les confesaré, en este 14 de febrero, día de San Valentín, día del amor por excelencia, que a estas alturas de mi vida aún ando buscando una buena definición sobre el amor. He leído muchas pero ando persiguiendo la mía propia.

No soy de sumarme a las celebraciones de “días de…” que pretenden que pasemos “por caja”. Me sobra esa parte “comercial y de consumo”. Aunque he de reconocer que algunas personas necesitan “un empujoncito” para decir determinadas cosas, para evidenciar determinadas emociones. Y es necesario, es fundamental, decir las cosas, verbalizar y también demostrar con otras acciones, por supuesto, eso que sentimos y que a veces se da por entendido. Así que si hoy, la celebración de este día, lo consigue, aunque solo sea por eso “bienvenido sea”.

El otro día charlaba con una mujer estupenda, se llama Susana, que me contaba que aprovecha este día para regalar algo, un pequeño detalle, no comprado sino hecho por ella misma, a las muchas personas de su entorno que quiere, amigas y amigos incluidos. Me pareció una forma muy chula de vivir este día.

Sigo descubriendo cada día cosas sobre el amor que me siguen sorprendiendo y, por supuesto, voy por la vida dejándome sorprender, feliz de ser sorprendida.

Y en estos tiempos en los que desafortunadamente vivimos tantos casos de violencia de género no está de más que le demos una vuelta a lo que “no es amor”.

El amor no puede dañar de ninguna manera. El amor no es control, no es imposición, no es anulación de tu personalidad. El amor no son gritos, ni falta de respeto ni intimidación. El amor no son empujones, ni bofetadas, ni cualquier forma de agresión física, psicológica o verbal.

El amor debe ser libertad absoluta, respeto absoluto, complicidad absoluta. El amor debe dejarnos crecer, ser nosotros mismos, disfrutar, reír… Lo demás, seguro, no es amor. Si no encontraron esto, sigan buscando.

Amen, amen mucho y déjense amar. Hoy y el resto de los 365 días del año porque el amor, en el más amplio sentido de la palabra, el amor en sus variadas y múltiples formas, es uno de los motores que mueven el mundo.

Espero que hoy le digan a alguna persona, ojalá a muchas, un “te quiero”. Ese será el mejor regalo.

Por cierto permítanme una licencia personal. Ayer se celebró el “Día de la Radio”. Desde aquí declaro hoy mi amor incondicional a este medio.