Un convenio que se hizo de rogar

Aranda de Duero

El Ayuntamiento de Aranda y la Fundación Caja de Burgos materializaban esta mañana la firma del convenio de colaboración que permite que el auditorio de la Plaza del Trigo se pueda volver a utilizar para acoger la programación escénica municipal.

El presidente de la Fundación considera que esta nueva fórmula a la que han llegado ambas partes tras un largo año de desencuentros supone una mejora sustancial con respecto a los contratos que en la etapa anterior firmaban para el uso de estas instalaciones. Rafael Barbero explicaba que el convenio aporta más estabilidad y permite al Consistorio mayor anticipación para cerrar sus espectáculos. “Antes el contrato suponía que desde que salía el contrato, hasta que eres capaz de cerrarlo pasaba un tiempo en el que el ayuntamiento no podía cerrar fechas para hacer programación, pero con esto hay mayor capacidad de anticipación para cerrar fechas y también el público arandino va a tener con mayor antelación las fechas de las programaciones”, contaba, destacando que las condiciones son más asequibles que el caché que tiene este auditorio para otras cesiones a terceros.

El convenio establece un canon de 1.300 euros para el uso del auditorio durante una jornada completa y de 900 para media jornada. También incluye otros gastos adicionales que el Ayuntamiento debe compensar: cincuenta céntimos por la venta de cada entrada en taquilla, un 1’10% de los importes cobrados con tarjeta bancaria, tanto en la pasarela de pago, como en taquilla y diez céntimos por cada entrada reservada para protocolo.