Va de ayuntamientos, va de futuro
La Firma de Javier Gómez Caloca
Va de ayuntamientos, va de futuro.La Firma de Javier Gómez Caloca
03:16
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1685005357359/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Palencia
Buenos días, vivimos en un país con tres niveles de Gobierno (Estado, CCAA y Entidades Locales) además de otros tres en el ámbito local, (Diputaciones, Municipios y pedanías) y a gran parte de la ciudadanía le resulta difícil saber de qué se ocupa cada uno para, así, poder pedir responsabilidades. Cualquier día es bueno para pedir cuentas, pero de forma solemne y radical lo hacemos en las elecciones, poniendo y quitando partidos y políticos, según nuestras preferencias.
El principio democrático exigiría a los actores políticos un mínimo de respeto con los asuntos que se ponen sobre la mesa en las campañas electorales: que aquello de lo que se habla sea sobre lo que se debe decidir en las urnas.
A veces ocurre lo contrario y en esta campaña como en ninguna otra. Los líderes de los partidos políticos cuando acuden a apoyar a sus candidatos municipales hablan de lo suyo, de política nacional, de sus obsesiones y eslóganes prefabricados. Y, a la vez, los candidatos municipales hacen ofertas que muy frecuentemente son ajenas a las competencias municipales, invisibilizando, así, el espacio político de los Ayuntamientos. Además, como consecuencia de las dos leyes antimunicipalistas aprobadas por el anterior Gobierno del PP: la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Financiera y la fracasada contra-reforma local de 2013, los Ayuntamientos han pasado de gestionar un 14% del conjunto del gasto público a mover sólo un 10,6% en 2021. Podrían gastar más porque tienen dinero ahorrado, hasta 37.000 millones de €, pero las reglas de Hacienda no se lo permiten y, así, pierde la ciudadanía, pierden los más débiles, pierde la convivencia local.
Lo que no nos han dicho los líderes nacionales –ni los locales- es si quieren o no Ayuntamientos con más capacidad política y económica para ayudar a la gente a superar sus necesidades sociales allí donde se producen, en la proximidad.
En fin, municipalizar el discurso político nacional acercaría la política a la ciudadanía, “nacionalizar” el debate político municipal, como se está haciendo, crea desafección y contribuye a poner al pueblo en brazos de los enemigos de la democracia, de los demagogos.
El lunes el INE publicó, como viene haciendo en los últimos doce años, los Indicadores Urbanos que permiten comparar a nuestra capital con las otras 125 ciudades de más de 50.000 habitantes y la evolución de diferentes indicadores en la última década, coincidente con el desplome demográfico de la ciudad. Unos pocos datos, para el día de reflexión.
- Retrocedemos en porcentaje de menores de 14 años, pero llegamos a la cima, subiendo 24 puestos, en lo referente a población mayor de 65 años. Somos mucho más viejos.
- Estamos a la cola de porcentaje de población en edad de trabajar, habiendo retrocedido 18 puestos. Por esto ha bajado la tasa de paro, no porque se haya creado más empleo.
- Estamos en el pódium de edad media más alta, lo que nos garantiza un lugar de privilegio en cuanto a la tasa de mortalidad. Sólo seis ciudades la tienen más alta.
- Por el contrario, hemos retrocedido dos puntos y cuatro puestos en tasa de natalidad.
- Dramática evolución del % de hogares de una sola persona sobre el total de hogares. Retrocedemos 26 puestos, en un tercio de los hogares se vive en soledad.
Hasta este gris panorama nos ha traído la inercia de la última década. El 28 hay que decidir el futuro de la ciudad y de los pueblos. Entre la experiencia inerte, en muchos casos cargada de años, y la inexperiencia ilusionada yo apuesto por lo segundo. Esto va de Ayuntamientos y de futuro y las oportunidades se acaban.