Rafael Moneo vuelve a presentar su proyecto de Lobo 17 años después
El prestigioso arquitecto defiende que puede seguir valiendo "como punto de partida" para otros, pero admite que hoy rebajaría el nivel de intervención en el monumento
Rafael Moneo (izda) acompañado por el arquitecto Pedro Lucas del Teso y por Concha González, presidenta de la Asociación de Amigos de Baltasar Lobo
Zamora
Rafael Moneo regresaba este jueves a Zamora, invitado por la asociación de amigos de Baltasar Lobo para recordar su proyecto de museo en el Castillo en el que albergar la obra del escultor, al que el Ayuntamiento de Zamora renunció en 2008 y que la asociación quiere volver a impulsar. Galardonado, entre otros, con el Premio Pritzker de arquitectura y con el premio Príncipe de Asturias, Moneo dijo que los casi 20 años transcurridos desde que el Ayuntamiento de Zamora le hizo el encargo, permiten también una reflexión más sosegada sobre si sigue teniendo sentido…
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Moneo ha vuelto a visitar el Castillo sobre el que trabajó durante dos años tratando de armar el proyecto que le encargó el Ayuntamiento de Zamora en 2004. Un proyecto que presentó en 2006 y que terminó abandonándose por razones que no se explicaron demasiado en su momento y que Moneo ha situado “entre las reticencias de arqueólogos e historiadores y el comienzo de la crisis económica”. Hoy, tras las excavaciones que se hicieron entonces, a Moneo le parece que el castillo es “una pieza diseccionada” al haber aparecido tantos momentos diferentes de su historia… y no prevalecer ninguno.
Preguntado por si cree que su proyecto de 2006 sigue siendo válido, el arquitecto aseguraba que podría ser “un buen punto de partida”, pero que hoy sería partidario de rebajar el nivel de la intervención lo máximo posible.
