Sonorama Ribera pondrá a la venta en breve sus últimos 500 bonos

Aranda de Duero

Apenas queda un mes para que la música inunde Aranda de Duero con la 26 edición de Sonorama Ribera. Tras conocer las últimas confirmaciones con el escenario de humor y el Escenario Charco, la pasada semana el festival daba a conocer las actuaciones por días. Y la euforia por el festival es desmedida, hasta el punto de que el cartel de 'No hay billetes' está a punto de colgarse, si bien este año el aforo se ha reducido para ganar en comodidad y calidad para los asistentes.

Así lo reconocía el director del festival, Javier Ajenjo, que nos acompañaba este martes en nuestro tiempo de Hoy por Hoy Aranda. "En breve vamos a anunciar que ponemos a la venta los últimos 500 abonos. Estamos por encima de 30.000 y el año pasado nos planteamos tener algo menos de gente para ganar en calidad y lo vamos a cumplir. Estamos sorprendidos una vez más por la repuesta del público -un 65% del mismo está por debajo de los 30 años- y sobre todo del arandino, porque cada vez es más potente. Este tiene que ser el mejor festival que hayamos vivido nunca. Al final la gente impulsa, aprieta, quiere venir y eso es bueno, pero también hay que cuidarles", asevera.

Más espacio

El director del festival ha especificado que este año se ganará también en espacio, con 5.000 metros cuadrados más. "El espacio del Picón será más amplio para que la gente disfrute más y mejor, y sabemos que hay aspectos mejorables, pero vamos a cumplir con la premisa de tener un aspecto magnífico y que tengamos lo que nos habíamos planteado, con más servicios", dice, destacando "la mejora no de bandas, que creo que tenemos un cartelazo, y sí la sostenibilidad y la inclusión, que no es lo habitual pero sí de lo que nos sentimos enormemente orgullosos". A mayores, añade "esa idiosincrasia del escenario Charco que se potencia, y la Plaza del Trigo, que vamos a cuidar más".

De la misma forma, en la faceta musical, Ajenjo ha desvelado que Jorge Drexler "nos llamó el otro día al verse cabeza de cartel", lo que "sigue alucinándonos". Y precisamente, ante la mezcla de estilos diversos en el festival, hay que destacar "los nuevos que han entrado para quedarse e integrarse". Al respecto, añade, los escenarios van a estar juntos, mientras otros serán circulares, pero también estarán unidos. "Esa integración de estilos tiene que producirse también en la música, en los escenarios. Una familia me contaba hace poco que los papás habían venido con sus hijos, porque a unos les gustaba el rock y otros lo urbano. Y que haya un festival que pueda disfrutarse tan ampliamente es algo que nos enorgullece, porque vivimos para la música y tratamos de hacer felices a quienes la aman. Somos un festival abierto con muchos estilos y abanicos de posibilidad", esgrime.

Orgullo

Javier ha querido recordar con orgullo que "el festival firma 1.200 contratos de trabajo", algo que "muchas veces no tenemos en cuenta", porque "son oportunidades que genera un festival como Sonorama Ribera", que "son 365 días al año que dan riqueza, oportunidades y que han creado empresas de Aranda que trabajan también fuera y que siguen al lado del festival con el que nacieron".

Futuro

Por último, el director del festival ya ha desgranado las primeras paradas de su gira por las Américas. "En noviembre nos vamos a Montevideo, y al D.F. en febrero, a soñar que podemos llevar todas las cosas buenas que tenemos aquí allí, bandas nacionales pero también locales, porque hemos descubierto un éxito, pensando que podemos ir y llegar más lejos, con armas como el lechazo o el vino, que hay que llevarlo lejos, abriendo horizontes con mucha ilusión", sentencia.

La charla al completo puede reproducirse en el audio superior.