Un Pucela voluntarioso pero sin pegada pierde ante el Espanyol 2-0

Valladolid

El Real Valladolid cedió por 2-0 y de esta manera rompe su magnífica racha en el RCDE Estadium. Y lo hizo en un partido igualado que se decidió en dos acciones en el inicio. En el 6' el portero Jonh volvió a dejar un sello de irregularidad que despista a propios y extraños. Primero hace una gran parada y después, en el rechace propina un manotazo sin sentido a Braithwaite, total penalti clarísmo. Para el primero con una gran parada, pero tiene que repetirse por Gustavo Henrique entra antes. El delantero del Espanyol, recuperado del manotazo, acierta con el segundo para firmar el 1-0 en el 6' de la primera mitad.

Otro error grave, esta vez de Escudero en la salida de balón, deja vendido a su equipo y Puado no falla ante el portero brasileño para poner el 2-0 en el 34'. Hasta entonces y a pesar del penati el partido estaba igualado, aunque con muy poco trabajo para los dos porteros.

Con la ventaja en el marcador, el Espanyol retraso su posición y marcó un bloque bajo y ordenado que el Real Valladolid no pudo ni supo desarbolar. Fue un querer y no poder con más del 60% de posesión. Alguna aparición de Kenedy y dos ocasiones claras,una de Sylla y otra de Cedric, pero muy al final del partido fueron las únicas oportunidades de un Real Valaldolid voluntarioso pero con una falta de imaginación incesante.