Las comparaciones no siempre son odiosas

Gumiel de Izán

Gumiel de Izán sigue notando el boom de visitas del turismo atraído por parecido entre la fachada de su iglesia colegiata y la ciudad arqueológica más conocida de Jordania. En poco más de un mes habrá pasado ya un año desde que a principios de octubre de 2023 la revista National Geographic definía a esta joya del barroco burgalés como “la pequeña Petra”. A partir de ahí fueron no pocos los medios de comunicación que siguieron la estela de esta comparación, contribuyendo a aumentar la curiosidad sobre este monumento, que se ha visto desbordada por visitantes.

Dice el alcalde que al principio tuvieron que organizarse para enseñarla por dentro con voluntarios, después hubo que empezar a remunerar este servicio y ahora están pensando de qué manera se puede seguir abordando este empuje turístico. “Pensábamos que era un boom de dos o tres meses pero ha pasado un año y cada vez viene más gente, así que el Ayuntamiento en principio lo que hizo fue organizarnos con voluntarios, que dieron paso a unas personas que contratamos para enseñar la iglesia y después ya, como vimos que esto iba a más, hemos puesto guías profesionales que se turnan y enseñan nuestra joya”, detalla Jesús Briones.

Lo cierto es que “la Petra española” está dando a Gumiel de Izán un incremento de visitantes que también repercute de alguna forma en su economía. El alcalde destaca que los turistas, aunque no se queden más que unas horas, dejan en algunos establecimientos del pueblo considerables beneficios. “Muchos se quedan a comer, con lo cual tanto los bares como los restaurantes que están al lado, ya me han reconocido que efectivamente se nota, en la panadería también y el que más y el que menos se toma un pincho o un café con leche”, añade Briones, que espera próximamente una visita de la embajada de Jordania para apreciar de primera mano este parecido.