Los agricultores se manifestarán contra las fábricas harineras en Arévalo
UPA-COAG y ASAJA han fijado el 29 de noviembre para la movilización
Valladolid
Las organizaciones agrarias UPA-COAG y Asaja han convocado para el 29 de noviembre una nueva movilización, esta vez ante las fábricas harineras Vilafranquina y Octavio Palomo, en Arévalo (Ávila), como protestar contra los elevados costes de producción cereal -entre 750 y 800 euros por hectárea-.
Así lo han anunciado los representantes de los agricultores durante una rueda de prensa en la que han insistido sobre la gravedad de la situación ante el posible acuerdo de la UE con Mercosur, que a su juicio va a perjudicar de manera notoria a los productores europeos.
En este sentido, Donaciano Dujo, presidente de Asaja Castilla y León, ha advertido de que para que sembrar cereal resulte productivo deberían superar los 4.000 kilos, de ahí que este año la sementera haya sido "menor que nunca".
Y ha asegurado que el acuerdo con Mercosur es "otro palo en la rueda para los agricultores de Castilla y León, la principal productora de cereal de España, ya que eso va a hacer que pueda entrar de todo y con cualquier modo de producción, sin prohibiciones, ni límites, ni burocracia".
Cadena alimentaria
Por eso. ha exigido que se cumpla la Ley de la Cadena Alimentaria y que no se pueda importar nada que no cumpla con la misma normativa que se impone a los demás y que, si se continúa sin poner aranceles de importación a Ucrania, al menos les den ayudas.
Y en relación con esta situación, ha reclamado que los productos amparados bajo la marca Tierra de Sabor tengan un seguimiento porque solo deben llevar el distintivo aquellos que se produzcan y elaboren en Castilla y León, lo que ahora no se da en algunos casos, ha denunciado.
Por su parte, el secretario de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Aurelio González, ha considerado fundamental que el gobierno cumpla con su compromiso de defender las 'cláusulas espejo' para que los productos que se importen cumplan la misma normativa que existe para el resto de países de la UE.
En el caso de ese posible acuerdo con Mercosur, no solo va a afectar al cereal, sino al maíz, la remolacha y a la ganadería, porque se va a dar entrada a 90.000 toneladas de carne de vacuno de Brasil y Argentina, cuando Brasil ya fue sancionada por el uso de clembuterol en sus reses.
Explotaciones familiares
"Es fundamental salvaguardar las explotaciones familiares agrarias, porque corren el riesgo de desaparecer y estas son importantes para mantener el medio rural, algo que siempre resaltan los políticos, pero luego defienden otros intereses", ha indicado.
Por este motivo, como ha anunciado Lorenzo Rivera, secretario general de COAG Castilla y León, se mantienen las movilizaciones, que comenzaron el pasado 11 de octubre en la delegación del Gobierno, porque además la situación se ha agravado en su opinión tras las firma de Mercosur y la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
Como sucedió en su anterior mandato, ha proseguido, todo apunta a que Trump volverá a imponer aranceles a China y Europa, por lo que la situación para los agricultores y ganaderos españoles puede ser aún peor.
"España es el país en el que más importaciones se producen de terceros países, un 44 por ciento, que supone 14 millones de toneladas de cereal, que se añaden a los 10 millones del mercado intracomunitario, y que debido a la sequía es comprensible este año, pero eso no puede hacer que el mercado exterior arruine la producción de los cerealistas españoles", ha detallado.
Las protestas se llevarán hasta la Harina Vilafranquina, porque es la mayor fábrica de harina de España, que obtuvo 62 millones de beneficio el pasado año, un 365 por ciento más que en el anterior, importando trigo de otros países, porque en Castilla y León sigue bajando la cantidad de superficie de cereal.
De hecho, ha confirmado Aurelio González, este año no se llegará a 1,6 millones de hectáreas sembradas, ya que los agricultores están optando por otros cultivos más productivos.