La Plataforma por la Integración acusa a Carnero de "condenar" a la ciudad "a la parálisis y la deuda"

Valladolid

La Plataforma por la Integración Ferroviaria de Valladolid denuncia que el alcalde, Jesús Julio Carnero, ha "condenado" a la ciudad a una parálisis total y a una deuda insostenible después de negarse a seguir adelante con la integración ferroviaria.

Aseguran que tanto su negativa a avanzar en las obras como su decisión de llevar a la Sociedad Valladolid Alta Velocidad a la disolución, han pasado de ser futuras amenazas a problemas presentes, cuyas consecuencias directas "ya estamos viviendo los ciudadanos".

Advierten de que las consecuencias ya son visibles a día de hoy, porque los pasos de Ariza entre la Farola y la Ciudad de la Comunicación, "vitales, aseguran, seguirán bloqueados, mientras que el viaducto de Arco de Ladrillo continuará "en un estado ruinoso". A ello se añade la incertidumbre que rodea ahora el desarrollo de viviendas en los antiguos talleres de RENFE y que Valladolid pierde la nueva estación de autobuses, competencia de la Junta de Castilla y León, la única obligación que tenía el gobierno autonómico en este convenio de integración. "Todos los proyectos clave para la modernización y la vida de la ciudad han sido paralizados", concluyen.

Más allá de estas consecuencias directas para los barrios 'pegados' a las vías, la Plataforma asegura que también hay consecuencias para el resto de vecinos, ya que "la liquidación de la SVAV y la probable penalización de 100 millones de euros de deuda se traducirá, inevitablemente, en recortes de servicios públicos esenciales o de inversiones necesarias en los diferentes barrios de Valladolid; es decir, menos dinero para la limpieza de las calles, para el transporte público, para las ayudas sociales y para el mantenimiento de la ciudad".

Una condena

“Esto ya no es una advertencia, es la crónica de la condena que el alcalde Carnero ha firmado para Valladolid”, afirma un portavoz de la Plataforma. “Cambió un proyecto real por una fantasía, y ahora que la fantasía se desvela imposible, nos ha dejado con la nada: ni integración, ni soterramiento, ni la herramienta para gestionarlo. El alcalde de es el único responsable de este bloqueo histórico”.

Desde la Plataforma por la Integración Ferroviaria aseguran que redoblarán sus esfuerzos para que cada vecino sea consciente de cómo esta decisión política "afecta directamente a su calidad de vida".

CCOO

Críticas que también llegan desde CCOO Valladolid, que advierte de que la postura del alcalde, "que ha abocado a la inminente disolución de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad", "frena la economía local y pone en riesgo inmediato inversiones e infraestructuras que podrían estar ya en marcha".

Recuerda que se pierden los tres pasos de Ariza, "fundamentales para conectar con seguridad la Ciudad de la Comunicación, la zona de Cuarteles, La Farola y La Rubia, y se frena la unión peatonal entre Pajarillos, Vadillos y el centro", además de paralizar la sustitución del viaducto del Arco de Ladrillo.

"Todo esto impide avanzar hacia una Valladolid amable, cohesionada y sostenible, donde la movilidad y el espacio público estén al servicio de la ciudadanía y no de los cálculos partidistas", asegura el sindicato, que considera que la integración "es el único proyecto viable".

Aprovechan para reivindicar de nuevo un corredor de cercanías entre Medina, Valladolid y Palencia, "con frecuencias inferiores a media hora". Creen que se esta forma mejoraría la movilidad y el acceso al empleo y se generarían cientos de puestos de trabajo directos e indirectos durante las obras.