San-Cha Informática cumple 40 años: cuatro décadas contribuyendo al progreso en la Ribera del Duero

Aranda de Duero

Cuatro décadas dan para mucho. Y en el universo de la informática, la evolución en cuarenta años ha sido de la nada al todo. En 1985 era un desafío y fuimos asistiendo a cómo el mundo se llenaba de ordenadores, cómo la red se hizo imprescindible, y cómo la informática pasó de ser un misterio a una necesidad diaria.San-Cha Informática cumple 40 años. Una historia de evolución, de esfuerzo y de visión. En la SER hemos querido seguir el camino trazado por una empresa referente y líder en su sector y su compromiso con el territorio.

Los inicios

San-Cha como denominación de empresa obtiene su imagen de marca de la primera sílaba de los nombres de sus dos fundadores; Santiago y Charo. Ambos recuerdan con mucho cariño aquellos primeros pasos de un mundo aún por descubrir y que empezaba a la par que su actividad empresarial, la informática “sin recursos económicos pero con una ilusión increíble". "Finalizados mis estudios de Grado Superior de Informática la opción era pasar a la Universidad o venir a casa, que me tiraba mucho, y donde había una persona, Santiago, que siempre me hablaba de emprender algo, de hacer algo nuevo. En eso surgió que un directivo de Pascual montó un concesionario de Olivetti, me conocía, me dio trabajo y, al año, él lo quiso dejar me propuso cogerlo yo y con Santiago, nos lanzamos a la aventura”, destaca Charo. Santiago lo define “como un sueño que empezaba a gestarse en un momento en el que la informática sonaba a fantasía, a ciencia ficción”.

Así nació San-Cha Informática, una empresa pionera que acercó la tecnología a empresas, instituciones y hogares cuando casi nadie sabía lo que era un ordenador. Aquellos primeros pasos marcaron la esencia de San-Cha: la cercanía, el servicio y la apuesta por formar a la gente para entender la tecnología, no solo usarla. En cuarenta años, la informática ha cambiado más que ningún otro sector. Lo que hoy es innovación, mañana es historia. Y mantenerse al día ha sido el gran reto de empresas como San-Cha Informática. “Es que empezamos con máquinas de escribir, reparándolas. Y luego el mercado evolucionó a las máquinas eléctricas y luego aparecieron los ordenadores con tarjetas perforadas, los disquetes…llegó la evolución y muchas anécdotas instalando Windows”.

Del primer ordenador que llegó a Aranda de Duero, instalado por San-Cha en Vidriera Arandina y que costó un millón de pesetas, a la digitalización completa de empresas, administraciones y hogares. Hoy, San-Cha Informática sigue siendo un referente en la Ribera del Duero. Han cambiado los equipos, los sistemas y los lenguajes, pero no la filosofía: ofrecer soluciones tecnológicas que hagan la vida más fácil a las personas y las empresas. “Hemos ido evolucionando porque somos un sector tecnológico. Nuestro fuerte siempre han sido los mantenimientos informáticos, ayudar a las empresas que lo que se implanta funciona y es útil para ellos, que les puede hacer crecer. Hace tres años nos hicimos agentes digitalizadores y el salto ha sido cuantitativo creando un nuevo departamento de marketing en el que hacemos diseño web y programación a medida. Esto nos ayuda a dar un soporte mucho más completo a las empresas”, destaca Charo Alcubilla.

El futuro se dibuja digital, sostenible y profundamente humano pero también inteligente y artificial. Pero para San-Cha Informática con la misma curiosidad que movió a sus fundadores en los años ochenta. Y tras cuatro décadas de historia, una pregunta inevitable: ¿de qué se siente más orgullosa Charo Alcubilla? “De la gran satisfacción cuando veo a muchos clientes que han trabajado con nosotros y están también con nosotros, que nos ven como una empresa que ha hecho un buen trabajo y el lado humano de que para nosotros son personas, no solo empresas”, sentencia, en un reportaje que puede reproducirse al completo en el audio superior.