Barry B se doctora en Madrid con su primera Riviera

Aranda de Duero

Noche de lluvia en la capital de España donde lo que caló realmente fue la música. Barry B se estrenaba con la primera de las tres Rivieras que ha agotado el cantante, y el arandino no fallaba en la primera cita. Con un concierto donde mostraba toda la fuerza de su último EP Infancia Mal Calibrada (que combina temas más cañeros con algún otro más sentimental), Gabriel Barriuso hacía las delicias de los más de 2.000 asistentes a la cita, en la que no faltaron por cierto muchos de sus paisanos, entremezclados en un público que ha ido en crecimiento, y que coreaba al unísono sus temas.

Temas que iban de su primera obra, Kit Kat, al que quizá le dio más a conocer, Yo Pensaba que Me Había Tocado Dios, con la que de cerró la noche. Una noche donde el artista subió al escenario a Candela Gómez, al vocalista de Depresión Sonora, o a la inmensa Gara Durán, otra promesa de la música (y pareja de Barry) con la que interpretó El Lago de Mi Pena, entre un mar de flashes y emoción.

Los saltos del público en Komantxería, la fuerza de Monster Truck, y el ‘cucucú’ que resonó en la sala con Infancia Mal Calibrada simplemente demuestran que el arandino se ha hecho un gran hueco en el panorama musical. Con el agradecimiento a su banda y equipo, a quienes le acompañan en el día a día, Barry se enfoca en las decenas de conciertos que ahora se el aproximan por todo el país, con sold out en dos noches en la Apolo de Barcelona y otras dos Rivieras que a buen seguro serán también inolvidables.

Es la muestra y el orgullo de que un arandino triunfe; el resultado de un festival Sonorama Ribera que puede empujar y ayudar a que los talentos locales se conviertan en nacionales. Y que sean muchos más.