Ribera del Duero genera 1.254 millones de PIB

Ribera del Duero

La Denominación de Origen Ribera del Duero afianza su posición como uno de los grandes referentes del sector vitivinícola español y un pilar económico de primer orden para Castilla y León. Así lo recoge el exhaustivo informe elaborado por PwC, que por primera vez mide de forma integral el impacto económico, laboral, turístico y fiscal asociado a la producción de vino y al enoturismo en el territorio.

Esta auditoría revela que la actividad vinícola de la D.O. genera 1.254 millones de euros de PIB al año en España, de los que 897 millones permanecen en Castilla y León, confirmando su papel estratégico en la economía autonómica. A esta cifra se suman 79 millones de euros derivados del auge del enoturismo, hasta alcanzar un impacto global que supera los 1.330 millones de euros anuales.

La capacidad de arrastre del sector queda patente en un dato clave: por cada euro de PIB generado directamente por la elaboración de vino, se producen 4,1 euros adicionales en el conjunto de la economía. Cada litro comercializado aporta 18,4 euros de PIB, una muestra del alto valor añadido del producto.

Segunda D.O. de España en número de bodegas

Con 316 bodegas y 359 instalaciones, la Ribera del Duero es la segunda denominación con más elaboradores del país. En 2024 comercializó 68 millones de litros por un valor de 808 millones de euros, cifra que incluye ventas nacionales e internacionales. La exportación sigue ganando peso: 12,4 millones de litros por valor de 173 millones, consolidando mercados como Suiza, México, Estados Unidos, Reino Unido o Alemania. El precio medio de exportación, 13,9 €/litro, multiplica por casi cuatro la media nacional y sitúa a la D.O. en la franja premium del mercado global.

El enoturismo: 381.000 visitantes y 1.350 empleos

La Ruta del Vino Ribera del Duero recibió 381.083 visitantes en 2024, con un gasto medio de 179 euros diarios, que se traduce en un impacto directo de 68 millones y un total de 79 millones de PIB. El sector sostiene 1.364 empleos, el 87% de ellos en Castilla y León, sobre todo en hostelería y comercio.

Cada enoturista genera un impacto económico medio de 585 euros, cifra que confirma la importancia de este segmento como motor complementario y creciente.

Casi 21.000 empleos vinculados al vino

La actividad productiva de la D.O. sostiene 19.552 empleos en España, con 13.595 ubicados en Castilla y León. El sector cuenta con más de 5.000 viticultores, un 5% del total de viticultores con D.O. de todo el país.

El informe subraya que por cada trabajador directo se generan 3,9 empleos adicionales en industrias auxiliares, logística, agricultura, turismo, comercio y hostelería. Además, la productividad por viticultor ha crecido un 80% en cuatro años, hasta los 93.564 euros, muy por encima de la media nacional.

Impacto fiscal: más de 459 millones anuales

La actividad vinculada a la D.O. Ribera del Duero genera 459 millones de euros en impuestos y cotizaciones sociales, de los que 431 millones proceden directamente del sector vinícola. El enoturismo aporta otros 28 millones. Según PwC, por cada euro de impuestos directos se generan 6,2 euros adicionales en recaudación total.

El volumen fiscal es tan significativo que permitiría financiar más de 3 de cada 100 euros del gasto público autonómico de Castilla y León en 2024.

Un modelo de calidad y competitividad

El informe concluye que Ribera del Duero ha logrado crecer incluso en un contexto global de menor consumo gracias a una estrategia centrada en la calidad, la diferenciación y la internacionalización. Su precio de exportación, su dinamismo enoturístico y su capacidad de generar empleo y riqueza consolidan a la D.O. como una de las denominaciones de origen más valiosas y competitivas del panorama internacional.