La Generalitat ratifica la eutanasia al pistolero de Tarragona
La Comisión de Garantías cree que el acusado cumple los requisitos y da el aval definitivo a la muerte asistida al margen de la "polémica jurídica"
Marin Eugen Sabau podrá morir dignamente. Los expertos de la Comisión de Garantía y Evaluación que se encargan de estudiar las peticiones de eutanasia han dado el último aval a la muerte asistida del exvigilante de seguridad que disparó a sus excompañeros de trabajo en Tarragona, hiriendo durante la fuga a dos Mossos d'Esquadra. Según el informe al que ha accedido SER CATALUÑA, los expertos del Departamento de Salud consideran que el acusado cumple todos los requisitos: vive con un sufrimiento físico grave, crónico e imposibilitador y es consciente.
Más información
La decisión de la Comisión se alinea con la que han tomado hasta ahora los médicos de Sabau y también la justicia, a quien las víctimas han recorrido pidiendo que se parara el proceso de eutanasia para poder juzgar al hombre que intentó matarlos. Según fuentes judiciales, después de varios recursos, la Audiencia de Tarragona ha señalado la vista para decidirlo este próximo jueves.
El 14 de diciembre del año pasado, después de atrincherarse armado en una masía abandonada en Riudoms, Sabau fue neutralizado por los Mossos, que le dispararon en brazos y piernas. A consecuencia de los rasgos, sufre una tetraplejia irreversible. Los médicos le diagnosticaron una fractura vertebral con lesión medular, fracturas en los brazos y en una pierna, que acabaron amputándole.
Según el informe de la Comisión, el conocido como pistolero de Tarragona hoy es "totalmente dependiente para las actividades básicas de vida viaria" y necesita "asistencia continuada y curas complejas". A pesar de que siente un fuerte dolor, los médicos no pueden sedarlo porque no está bastante estable. En los últimos siete meses ha sido ingresado a la UCI, en el Hospital de Bellvitge, el Hospital Vall de Hebrón y el Hospital Penitenciario de Terrassa, donde permanece ingresado.
Todo y las múltiples patologías físicas, Sabau es consciente, y mantiene que "su vida es intolerable" puesto que la situación en la que se encuentra "no se compatible con sus valores". En el informe de la comisión, formada por un médico y un jurista, este segundo apunta que han dado el aval en la muerte asistida "haciendo abstracción del debate jurídico sobre la situación procesal y la privación de libertad del solicitante". El jurista considera que "ni la dupla designada ni, en su caso, la comisión tiene que entrar en esta polémica jurídica, ni se tiene que dejar influenciar por ella", puesto que "corresponde resolverlo a los tribunales de justicia".