Investigadores de la Vall d'Hebron identifican un "interruptor" epigenético que bloquea el avance de un cáncer infantil muy agresivo
El hallazgo abre la puerta a nuevas terapias que paralicen el proceso de metástasis
Barcelona
Los investigadores han observado que inhibiendo con fármacos el complejo BAF, un complejo de proteínas esencial para el crecimiento de los tumores, se bloquea la reproducción de células malignas. Este mecanismo permite frenar la progresión del cáncer primario (el neuroblastoma) y a la vez evita que las células invadan otros órganos y tejidos, o sea, la metástasis.
"Apagar este interruptor genético permite que lleguen menos células a otros órganos y que las que lleguen tengan menos capacidad de adaptarse al nuevo medio y crecer", explica Miquel Segura, responsable del laboratorio de Tumores Neuronales del Vall d'Hebron Institut de Recerca (VHIR). "O sea, que tiene una función dual: inhibir el crecimiento del tumor primario y bloquear la formación de metástasis".
Un cáncer pediátrico muy letal
El neuroblastoma es una enfermedad poco común pero altamente agresiva, que representa el 10 % de todos los cánceres infantiles y el 15 % de todas las muertes en pacientes oncológicos pediátricos.
Afecta principalmente a niños menores de 5 años y se origina en células nerviosas inmaduras que se encuentran en varias áreas del cuerpo, siendo más frecuente en las glándulas suprarrenales (por encima de los riñones), aunque también pueden aparecer en otras áreas del abdomen, en el tórax, el cuello o cerca de la columna vertebral.
Otros tipos de cáncer
"Investigaciones futuras deberán determinar si este mecanismo (la inhibición del complejo BAF) sirve para frenar el avance de otros tumores, tanto en niños como en adultos", dice Segura. "Por lo pronto, este trabajo ha propiciado una nueva diana terapéutica para el tratamiento del neuroblastoma infantil, aunque pasarán entre 5 y 10 años antes de que el hallazgo tenga uso clínico".
Susanna Ruiz
Periodista. Animals i llibres.