El Govern de Aragonès pide la dimisión de la ministra en funciones Raquel Sánchez

Barcelona

El Govern de Pere Aragonès pide la dimisión de la ministra de Transportes en funciones, Raquel Sánchez. La portavoz, Patrícia Plaja,la acusa de mentir sobre las causas de la rotura de la catenaria en Gavà y el posterior incendio que el pasado mes de mayo afectó a la circulación de trenes durante 3 semanas.

El informe de Adif, que avanzó SER Catalunya el pasado 15 de septiembre, concluye que la incidencia de Gavà se produjo por el desgaste de la catenaria, que acabó rompiéndose, y explica que el incendio posterior, que afectó la señalización, se originó porque alguien había robado una parte de las instalaciones que debían funcionar como una toma de tierra. La portavoz del Gobierno, Patrícia Plaja, destaca que este documento descarta la hipótesis del rayo, que planteó en un primer momento el ministerio, y asegura que la causa del incendio fue la falta de mantenimiento de la catenaria que había revisado hacía 18 meses. Dice Plaja que la ministra lo negó en período electoral y que "quien miente y, a posteriori, no da las explicaciones necesarias a la ciudadanía, no puede continuar al frente de un ministerio".

La consejería de Territori conoce el informe desde hace dos semanas, pero no ha sido hasta este jueves que el gobierno de Pere Aragonès ha pedido la dimisión de la ministra.

El informe determina que la falta de una pieza en la catenaria habría provocado un mal contacto eléctrico y un sobrecalentamiento del cable que, junto a otros factores externos, como tormentas eléctricas, lo degradaron hasta que se rompió. Por "mala suerte", dice la parte del informe que explicó SER Catalunya, este cable cayó sobre una señal con una estructura metálica, afectando al resto del cableado y provocando un incendio que inutilizó el sistema de señalización. Esto podría haberse evitado si, tras la caída del cable, las tomas de tierra hubieran funcionado, pero este sistema de protección estaba inutilizado, según el documento, porque se habían vandalizado, porque alguien había robado parte de las instalaciones. Según los datos del Ministerio de Transportes, la última revisión de las instalaciones de seguridad se había realizado el 26 de abril y la incidencia se produjo el 1 de mayo, por tanto, esta vandalización se habría producido en los 4 días anteriores a la rotura del cable. La catenària se había revisado 18 meses antes.

Rifirrafe político

La incidencia de Gavà provocó un rifirrafe político entre la Generalitat y el ministerio. El Gobierno acusó a Madrid de no haber invertido lo suficiente en la red de Cercanías y volvió a reclamar el traspaso íntegro de Cercanías, con vías, trenes y trabajadores. Además, Esquerra Republicana se alió con el PP en el Senado y en el Congreso para reprobar a la ministra, Raquel Sánchez, que insiste en que son el Gobierno que más está invirtiendo en la red ferroviaria de Catalunya. En paralelo, la Generalitat abrió un expediente a Renfe por la reacción que tuvo la empresa tras la incidencia de Gavà. El departamento de Territori consideró que debería haber puesto autobuses desde el primer día que fueran una alternativa para los viajeros que no podían utilizar los trenes.