¿Se dirige Barcelona a una huelga de alquileres?
El investigador en vivienda, Jaime Palomera, ha señalado cuáles son las condiciones que deben darse, y se dan, para que ocurra, y Sara, que ya está en huelga de alquileres en Madrid, ha reivindicado la importancia de luchar por la vivienda.
Article 47: Ens dirigim a una vaga de lloguers?
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Barcelona
Este fin de semana tendrá lugar en Barcelona una manifestación que se presenta como sin precedentes. La protesta, organizada por el Sindicato de Inquilinas, busca reducir a la mitad el precio de los alquileres y amenaza con una huelga de alquileres. Actualmente, el precio medio del alquiler en Barcelona es de 1.130 euros, el mismo que el salario mínimo. La convocatoria es el sábado, a las cinco de la tarde, en la plaza Universidad.
El objetivo es ser un punto de inflexión, como lo fue en Madrid en octubre, donde también se llevó a cabo una huelga de alquileres en la que participaron decenas de vecinos de varios bloques de un mismo propietario, el fondo de inversión Nestar-Azora, con 42 bloques en total. Sara, de 36 años, es una de esas vecinas. Hoy, en El Balcón, ha explicado su situación junto a Jaime Palomera, cofundador de Reviu, quien detalló en qué consiste una huelga de alquileres.
100 euros menos
Sara tiene 36 años y vive en un piso en Madrid con su marido, que tiene una discapacidad, y sus dos hijos. Pagaban 900 euros al mes, pero en agosto decidieron comenzar una huelga de alquileres, coincidiendo con una demanda colectiva junto a otros vecinos contra su propietario. Decidieron dejar de pagar aquellos gastos que consideraban "abusivos", como el IBI o los gastos de comunidad, y ahora pagan 782 euros al mes. También dejaron de abonar, desde hace un año, el seguro de impago.
Ese dinero no está perdido, sino consignado y guardado en una cuenta “por si pasa algo”, dice Sara, quien también está amenazada con una orden de desahucio. Por problemas personales y económicos, tiene dos mensualidades sin pagar, que aún no ha podido abonar. "Muchos vecinos tienen miedo, pero es obligación de los inquilinos de fondos buitre tomar estas medidas; ellos juegan con mi dinero, pues yo juego con el suyo", ha constatado.
Jaime Palomera ha destacado que existen diferentes tipos de huelgas de alquileres, dependiendo del "colectivo y su fuerza". Algunas consisten en dejar de pagar todo el alquiler, mientras que otras, como en el caso de Sara, solo una parte proporcional. Lo importante, sin embargo, es "dejar de pagar de manera colectiva". Además, en países como Estados Unidos, Países Bajos o Inglaterra, este tipo de huelga está legalizada si el propietario no cumple con sus obligaciones.
¿La huelga en Cataluña?
La pregunta es si lo que está ocurriendo en este bloque de Madrid podría suceder en Cataluña, y la respuesta de Palomera es que "ya ha ocurrido en los últimos años". Pasó durante la pandemia, cuando algunos vecinos se organizaron y decidieron aplicar la “desobediencia civil” negándose a pagar un aumento de alquiler que consideraban ilegítimo.
Las circunstancias actuales son favorables para una nueva huelga. La primera es "un agravio", la sensación de haber llegado al límite de una situación injusta. La segunda, "tener vecinos en la misma situación", y la tercera, "la existencia de una organización de referencia", en este caso, el Sindicato de Inquilinas. Según Palomera, las tres condiciones se están dando ahora mismo, por lo que es posible que haya una huelga de alquileres.
¿Cuáles son las consecuencias? Siempre existe la posibilidad de que la propiedad intente desalojar a las personas que viven allí, pero "si no estás solo, si estás con vecinos organizados, no tendrán la capacidad de echar a todos".
Los propietarios
Desde la Asociación de Propietarios de Cataluña han denunciado que se les está "criminalizando" al compararlos con los grandes especuladores. El presidente, Sergi Llagostera, también ha considerado que es la administración, y no los propietarios, quien debe solucionar el problema de la vivienda, y propuso algunas medidas que creen necesarias para bajar los alquileres, como medidas fiscales. Sin embargo, Palomera ha advertido que el sector inmobiliario es el que recibe "más ayudas fiscales".
Eso sí, Palomera también reconoció que no es lo mismo un gran propietario que un pequeño propietario, y que no todos los propietarios son iguales: "Hay tanto pequeños como grandes propietarios que cumplen con sus obligaciones y tienen una buena relación con el inquilino", ha apuntado Palomera. El investigador en vivienda ha destacado que, en el caso de los pequeños propietarios, la organización vecinal es más difícil, pero que la mayoría de conflictos terminan con un acuerdo mediado por el Sindicato de Inquilinas.
Laura Polo Dalfó
Redactora, productora, reportera i el que faci falta a El Balcó de SER Catalunya. Graduada en Periodisme...