Hablan los albañiles de la Sagrada Família: "Trabajamos a 140 metros de altura con piedras de 1.600 kilos"
Un 40% de los trabajadores del sector de la construcción son inmigrantes, una cifra que se dispara cuando se pone el foco en peones y albañiles
Barcelona
Alberto Troncoso nació en Ecuador. Vive desde hace años en Barcelona, y cada vez que le cuenta a alguien dónde trabaja, recibe el mismo chascarrillo: "¿No váis a terminar nunca la Sagrada Família?". Como en todas las grandes obras de España, el atractivo turístico más conocido de nuestro país tiene una gran cantidad de personas inmigrantes trabajando para sacar de los planos la obra maestra de Gaudí y convertirla en realidad.
Este templo cristiano va levantando torres, esculturas y monumentos gracias al sudor de cientos de trabajadores que, muchas veces, profesan religiones distintas. "Estamos arriba del todo, a casi 140 metros de altura y vamos colocando escalones o piedras de muro, que son enormes. Guiamos la grúa, la ponemos a sitio...", relata Alberto. Coloca piedras de hasta 1.600 quilos que debe enganchar y asegurar antes de subirlos a la grúa.
En la Sagrada Família trabaja un ejército de arquitectos -liderados por Jordi Faulí - y también escultores, picapedreros y un equipo especializado en restauración. Pero los que nunca faltan son los albañiles rasos, que deben materializar todos los planos y ejecutar lo que arquitectos e ingenieros han planeado antes.
Lhou llegó a Catalunya el 2004. Trabajaba en la construcción en Marruecos, su país natal, y está encantado de trabajar en la basílica. "Aquí hay mucha seguridad y es una obra limpia, todos quieren venir", asegura. Al ser, seguramente, una de las obras más conocidas del mundo, las condiciones laborales son mucho más fiables que en otros sitios. Lhou se encargó en su momento de hacer la forja de la nave. "Hacemos la faena gorda, la más grande", asegura.
Daniel Morales, uno de los jefes de obra, asegura que muchas piezas vienen ya hechas de fuera. "Es un equipo multidisciplinar con gente muy especializada", asegura. "Todo el mundo se fija en esta obra... Hace años era muy manual, pero ahora es más industrializada con mucha tecnología", relata.
Los inmigrantes son mayoría en las subcontratas de la construcción
Un 40% de los trabajadores del sector de la construcción son inmigrantes, según un informe de Comisiones Obreras. Es una cifra considerablemente superior a la media catalana, en la que las personas nacidas fuera de España representan un 26%. Aun así, cuando se pone el foco en peones y albañiles, el porcentaje se dispara. "Llegamos al 70%", asegura Carlos del Barrio, responsable del área de de Acción Sindical de CCOO en Catalunya.
El sector de la construcción tiene, por un lado, grandes empresas contractistas con empleados muy cualificados, sobretodo ingenieros. Su principal objetivo es conseguir licitaciones. Por otro lado, hay las empresas subcontratadas, donde se externalizan las tareas más duras. Aquí es donde se detectan la mayoría de casos de explotación y de trabajadores en situación administrativa irregular.
El convenio colectivo del sector de la construcción en la provincia de Barcelona marca un salario mínimo de 25.000 euros al año para un peón. "Los trabajadores quizá reciben ese dinero, pero trabajando 6 o 7 días a la semana y 12 horas al día. Este es el principal problema", lamenta Del Barrio.
"Necesitaba trabajo urgente para mantener a mi família, la construcción era lo más accesible"
Mhamed Jmil es peón de la construcción. Nació en Marruecos, y llegó hace 26 años con un título de licenciado en economía bajo el brazo. Entró a trabajar en una obra porque era la opción más viable para asegurar un sueldo rápido, y ya no ha dejado de hacerlo. Tiene dolores crónicos en la espalda y la rodilla después de tantos años.
"En verano te asas bajo el sol, hace mucho calor y los días se hacen largos. Son condiciones duras", asegura. Gracias a estas jornadas maratonianas, ha podido matricular a su hijo en la universidad. El joven no quiere ni oír hablar de la obra "cuando llego a casa y le cuento cómo me ha ido el día, me dice: papá yo esto no lo aguanto", ironiza.
Hoy por Hoy Catalunya 08:20 (09/12/2024)
Mhamed quiere también reivindicar el papel de los inmigrantes en la sociedad catalana. "Llevo aquí 26 años cotizando, pagando mis impuestos, contribuyendo al sistema económico", asevera. "Igual que yo, muchos inmigrantes", remata. Asegura que hay que desmentir los discursos de odio que proliferan en la sociedad y que señalan a las personas nacidas fuera de España como problemáticas.