La Fiscalía pide archivar los insultos racistas a Vinicius en un clásico en Montjuïc al no considerarlos delito de odio

Barcelona

La Fiscalía de delitos de Odio de Barcelona pide archivar la causa por los insultos racistas contra el jugador del Real Madrid, Vinicius Jr. en un partido contra el Barça. Según la Liga, algunos seguidores del Barcelona le gritaron "puto mono" desde la tribuna. Sin embargo, la fiscal cree que esos insultos no están claros y que, incluso si lo fueran, como el jugador no se enteró, no tienen suficiente entidad para considerarlos un delito de odio.

Los hechos sucedieron en un clásico, F.C. Barcelona - Real Madrid, celebrado el 28 de octubre de 2023 en el estadio de Montjuïc. Los investigadores llegaron a identificar a tres posibles hinchas del Barça como autores de los insultos. Uno de los investigados era menor de edad, otro, se tapaba la boca en el video donde se le identificó y el tercero declaró ante el juez de instrucción que no había dicho "puto mono" sino "mucho morro", en relación con una jugada pitada por el árbitro.

Además, la víctima, Vinicius, declaró que tampoco había escuchado los insultos en directo, por la distancia entre la grada y el campo y que posteriomente no había entendido "puto mono", sino "mono tonto". De modo que la Fiscalía concluye que "no puede aseverarse que se trate de una acción que pueda vehiculizar un discurso capaz de comprometer los valores constitucionales". "Ni siquiera hay certeza en relación con las expresiones supuestamente constitutivas de infracción", añade la fiscal.

Según la fiscalía, los hechos no pueden constituir un delito de odio porque "no dieron lugar a la interrupción o suspensión del partido, no fueron ejecutadas de forma coral, no se produjo el efecto llamada en el público, no consta que ninguno de los investigados pertenezca a un grupo radical o extremista, y no fueron unidas a otros delitos". Por eso, el ministerio público pide archivar el caso y no llevarlo a juicio.

En cualquier caso, la fiscal insta a la jueza de instrucción a remitir el caso a la Oficina de Igualdad de Trato y No Discriminación de la Generalitat, por si procediera abrir un proceso sancionador contra los investigados a nivel administrativo.