El temor de un educador tras el caso DGAiA: "Sospechamos que hay otros menores víctimas de redes de prostitución"

Barcelona

"Sospechamos que hay otros menores que han caído en redes de prostitución y tráfico de drogas", ha alertado el educador y mediador social, miembro del sindicato CGT de infancia, Mustafa Asrih, en relación con el caso de la red de pederastia y prostitución destapado por SER Catalunya hace dos semanas. Un caso que ha provocado la reacción del gobierno catalán, que ha anunciado una "transformación profunda" de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAiA).

La previsión es hacer cambios en tres meses. Para los educadores sociales, un tiempo que "no es suficiente": "Una transformación profunda no es cosa de tres meses. Debería durar más de un año y ser integral", ha lamentado Asrih en una entrevista en el programa Aquí Catalunya. En nombre de sus compañeros, el mediador social ha pedido que la Generalitat los haga "partícipes" de la renovación de la DGAiA. "Contando solo con la participación de las entidades que gestionan los centros de menores no será suficiente", ha criticado.

Carencias "de todo tipo"

Asrih ha denunciado carencias "de todo tipo" en los centros públicos: "No hay herramientas para trabajar en la protección de los menores. Tampoco para nuestra propia protección, la de los profesionales". El educador ha lamentado que la escasez de recursos dificulte su labor: "Muchos se escapan. Se están admitiendo muchos niños y adolescentes sin referentes, y se les está conteniendo antes que educando". En concreto, Asrih ha señalado los años 2016, 2017 y 2018.

Según él, hay "mucha diferencia" entre las condiciones laborales de quienes trabajan para entidades privadas y los que lo hacen para la Generalitat: "Si los educadores y educadoras no están bien, los menores tampoco". En este sentido, Asrih ha señalado directamente a la DGAiA, a quien considera responsable de la situación de los niños y adolescentes, y de los centros. Para el educador social, el organismo debería hacer un seguimiento "muy estricto" de lo que ocurre, y, por ahora, no lo está haciendo: "Espero que esto se impulse con la transformación".