Selecciona tu emisora

Ir a la emisora
PerfilDesconecta
Buscar noticias o podcast

Las grandes empresas de FP privadas regularizan las condiciones de sus trabajadores tras años de convenios inadecuados

Ilerna e IFP Planeta aplican este curso el convenio de enseñanza por la presión de los sindicatos y después de media docena de denuncias a Inspección de Trabajo

Una estudiant seguint una classe online / UMU

Una estudiant seguint una classe online

Barcelona

El espectacular crecimiento que ha experimentado la Formación Profesional (FP) en los últimos años ha estado impulsado principalmente por la iniciativa privada y, muy especialmente, por aquellas empresas que se han especializado en ofrecer estos estudios en modalidad a distancia. Empresas que, según reconoce la Generalitat de Catalunya, han crecido de “forma descontrolada”, en un escenario de regulación mínima y prácticamente sin supervisión. El gobierno catalán aprobó en 2021 un decreto con el que pretendía “garantizar la calidad” de una oferta formativa en expansión, pero una de las empresas del sector lo recurrió, alegando una cuestión de forma, y dejó la norma sin efecto. Desde hace un año, el Departamento trabaja en un nuevo marco regulatorio, que aún no está aprobado.

En este contexto, y según ha podido confirmar SER Catalunya y El País, dos de las empresas de referencia del sector, Ilerna y Planeta IFP, han estado aplicando durante años a sus trabajadores convenios que nada tienen que ver con la enseñanza. En el caso de Ilerna, que en el curso 2022/23 tenía en su centro de Lleida más de 44.000 alumnos matriculados procedentes de todo el Estado, la compañía ha estado aplicando a todos sus profesores el convenio de marketing y consultoría, que prevé una jornada laboral de cuarenta horas semanales, diez más de las treinta horas (entre lectivas y no lectivas) que establece el convenio de enseñanza privada reglada no concertada de Cataluña.

El pasado mes de septiembre, y tras más de media docena de denuncias de sindicatos y extrabajadores ante la Inspección de Trabajo, la empresa comunicó a su profesorado que, “teniendo en cuenta sus peticiones y con el objetivo de regularizar la situación de la plantilla”, pasaba a aplicarles “el convenio que corresponde a la actividad docente”.

Ilerna niega que el cambio se deba a un requerimiento explícito de la Inspección de Trabajo, aunque entre los meses de abril y julio el sindicato UGT, por un lado, y siete extrabajadores, por otro, presentaron ocho denuncias ante este organismo. Fuentes de la Inspección de Trabajo explican que, aunque no entra en sus funciones determinar qué convenio debe aplicar cada empresa, sí supervisan que las condiciones laborales, tanto de horario como retributivas, se ajusten a la naturaleza de la actividad desempeñada.

A preguntas de esta redacción, la compañía insiste en que el cambio de convenio es fruto de un “acuerdo mutuo con los trabajadores” y defiende que hasta ahora aplicaba el de marketing “porque parte del profesorado realizaba tareas de actualización de contenidos o revisión de libros”, entre otras.

Menos horas de trabajo, pero la misma carga laboral

Con la entrada en vigor del nuevo convenio, el profesorado online de Ilerna ha pasado, según confirma la propia empresa, de una jornada de 1.780 horas anuales a una de 1.376 horas. En lo que no ha habido cambios es en los salarios, ya que, según Ilerna, los sueldos ya eran “superiores” a los que marcaba el convenio anterior, puesto que todos los docentes cobraban complementos. Sin embargo, trabajadores consultados por SER Catalunya —que prefieren mantener el anonimato— señalan que dichos complementos no se sumaban a la base de cotización. “Ilerna ha estado comprando jamón a precio de mortadela”, resume un empleado.

Más información

Los profesores consultados confirman que el cambio de convenio es positivo, pero niegan que haya sido fruto de un acuerdo negociado con ellos y alertan de que la reducción de jornada que fija el nuevo convenio no ha ido acompañada de una disminución de la carga de trabajo. “Hay profesores que, en una misma asignatura, tienen asignados hasta 2.000 alumnos y cada día se encuentran con cientos de mensajes por responder”, explica un extrabajador y corroboran empleados actuales. “Y a eso hay que sumar la preparación de las sesiones online y la corrección de exámenes o trabajos”, añade otro. “Y hacerlo todo en menos tiempo, porque ya nos han dicho que no aceptarán horas extra”. Todo ello, concluyen, hará que “la calidad de nuestro trabajo se resienta y que nos veamos obligados a corregir las actividades de los alumnos de forma más superficial”.

Ilerna no ha querido responder a la pregunta de si la aplicación del nuevo convenio —que reduce en 400 horas anuales la jornada de cada profesor—, se ha traducido en una ampliación de la plantilla de docentes.

Los profesores de IFP Planeta, con contrato de oficinistas

En el caso de IFP Planeta, todo el personal que trabaja en sus centros presenciales de L’Hospitalet de Llobregat y de Barcelona —alrededor de ochenta trabajadores entre docentes, coordinadores y personal administrativo y de servicios— se ha regido en los últimos años por el convenio de oficinas y despachos, según denuncian los sindicatos. En los últimos meses, y siempre según la versión de los trabajadores, la compañía alcanzó un acuerdo con la sección sindical de la CGT para empezar a aplicar, a partir de este septiembre, el convenio de enseñanza privada reglada no concertada de Cataluña, que hace años que aplican otras empresas de referencia en el sector como CEAC o MEDAC.

El cambio implica, como en el caso de Ilerna, una reducción de la jornada laboral, de cuarenta horas semanales, sumando las de presencia en el centro y el trabajo en casa, a un máximo de treinta horas de lunes a viernes. Y también un aumento sustancial de los salarios, que los empleados empezarán a percibir antes de fin de año, con efecto retroactivo desde el 1 de septiembre. Desde la CGT señalan que, por cada año en que el personal ha estado contratado bajo el convenio de oficinas y despachos, “la empresa se ha ahorrado medio millón de euros anuales en sueldos, y cada trabajador ha dejado de cobrar unos 7.000 euros al año”. El representante sindical de CGT, Quico Montáñez, denuncia que durante todo este tiempo la compañía ha pensado “única y exclusivamente en sus beneficios” y no en cuidar a sus empleados. Cree que la rectificación responde a la movilización de los trabajadores que desde hace meses se han organizado y han reclamado mejorar sus condiciones.

Por lo que respecta al profesorado encargado de los cursos online de IFP Planeta, la mayoría, según fuentes sindicales, tiene contratos como autónomos, en algunos casos porque la docencia es solo una actividad complementaria, no la ocupación principal de estos profesionales. Desde IFP Planeta no han querido confirmar ni comentar ninguno de estos detalles.

Nace una nueva asociación de profesores online

El pasado verano se constituyó legalmente la Asociación Nacional de Profesoras y Profesores Online de España (ANPROE), con el objetivo de lograr que la docencia privada a distancia sea “de calidad, digna y respetuosa con los derechos laborales” de sus trabajadores. El grupo mantuvo un encuentro a principios de octubre con representantes del Ministerio de Educación para exponer las condiciones de precariedad en las que trabajan muchos docentes online y pedir una regulación común en todo el Estado que establezca, entre otras cosas, el número máximo de alumnos que debe atender cada profesor y un horario claro de docencia, preparación de clases y atención al alumnado.

El presidente de ANPROE, Pablo Díaz, recuerda que estas empresas obtienen la autorización para operar en una comunidad autónoma, pero por la propia naturaleza de los estudios a distancia terminan funcionando a nivel nacional, con profesores y alumnos distribuidos por todo el país.

"Se ha priorizado el negocio", dicen los sindicatos

Desde el sindicato CCOO aseguran que, cuando han planteado a la patronal de las escuelas privadas la necesidad de una regulación específica para la formación online, “no hemos visto demasiado interés”. Explican que aplicar a todos estos docentes el convenio de enseñanza privada reglada no concertada es un primer paso, pero que sería necesario articular una regulación propia que fije el máximo de alumnos por grupo virtual o las horas dedicadas a responder preguntas del alumnado.

El responsable del sector de enseñanza privada reglada de la Federación de Educación de CCOO, José Domínguez, señala que en un aula presencial está muy claro cuál es la capacidad de un grupo, pero en la educación a distancia las empresas juegan con la dimensión. “La rentabilidad está en la ausencia de ratio”, subraya Domínguez, quien también destaca que muchos docentes acaban trabajando de lunes a domingo, ya que buena parte de sus alumnos aprovechan el fin de semana para conectarse y plantear dudas. Y las empresas les exigen que respondan rápidamente. “La atención al alumnado no puede ser 24 horas al día, los siete días de la semana”, concluye.

Sobre la nueva legislación que prepara la Generalitat, fuentes de la consejería de Educación y Formación Profesional explican que el texto que se ha trabajado en los últimos meses ya tiene el vistobueno de los servicios jurídicos del gobierno catalán, y que de forma "inminente" se enviará al Consell d'Educació de Catalunya y se iniciará el trámite de exposición pública.

Soledad Domínguez

Soledad Domínguez

Redactora de informativos en Ràdio Barcelona, especializada en Educación. Siempre que me dejan, me cuelo...

 

Directo

  • Cadena SER

  •  
Últimos programas

Estas escuchando

Hora 14
Crónica 24/7

1x24: Ser o no Ser

23/08/2024 - 01:38:13

Ir al podcast

Noticias en 3′

  •  
Noticias en 3′
Últimos programas

Otros episodios

Cualquier tiempo pasado fue anterior

Tu audio se ha acabado.
Te redirigiremos al directo.

5 "

Compartir