Alcalá de Henares presenta el monumento en memoria a las víctimas de ETA

Alcalá de Henares

Esta mañana, Alcalá de Henares ha querido recordar a las víctimas de la banda terrorista ETA en un acto de homenaje en la Plaza de la Paloma. Un acto marcado por el recuerdo a las víctimas y por la lluvia, que no ha impedido la celebración del acto. Se ha homenajeado el recuerdo a 11 víctimas entre policías y militares relacionadas con Alcalá de Henares. El primero de ellas, José Antonio Barrado Recio, un agente fallecido en 1988 en Éibar a causa de un coche bomba. Un año más tarde, dos asesinados por un coche bomba en Alcalá-Meco. Las siguientes víctimas, en 1993, fueron siete militares que iban en un convoy por la glorieta madrileña de López de Hoyos cuando ETA detonó una bomba. Finalmente, en el año 1994, otro militar fue asesinado en la Plaza de Ramales de la capital.

Hace varios años ya, en 2018, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares llevó a cabo una investigación para determinar qué víctimas estaban directamente relacionadas con el municipio. De esta manera, contactó con los familiares para obtener su autorización y la iniciativa fue aprobada en el pleno municipal por unanimidad. Hoy, por fin, en la Plaza de la Paloma, ve la luz un monumento que lleva aguardando su instalación desde el año 2020 con los nombres y fechas de las víctimas.

Como no podía ser de otra manera, han asistido todas las familias de las víctimas para homenajear a sus seres queridos. El acto ha contado con la presencia de 3 representaciones de cada uno de los ejércitos españoles, marina, tierra y aire. Además, el alcalde del municipio, Javier Rodríguez Palacios, ha acudido al acto junto a la Ministra de Defensa, Margarita Robles. En mitad de su discurso, la ministra ha querido recordar su experiencia personal con una de las víctimas el día de su asesinato, cuando recién llegada al Ministerio del Interior, un mediodía le llamaron para comunicarle que el Teniente General Veguillas había sido asesinado. La Ministra, que afirma acudir rápidamente a la Plaza de Ramales donde se encontraba el Teniente y su chófer fallecidos, no olvida aquella fatídica escena.

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