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Problemas de visión habituales en la tercera edad

Cataratas, glaucomas u ojo seco son algunos de los más comunes

Hablamos con el geriatra Fran Soria sobre enfermedades oftalmológicas en los ancianos

Fuenlabrada

El ir cumpliendo años suele venir asociado con algunos problemas visuales en nuestros mayores. Fran Soria, geriatra del Hospital Universitario 12 de Octubre y Hospital La Luz de Madrid, ha repasado cuales son los problemas más frecuentes de visión en los ancianos.

Las cataratas son “la pérdida de la trasparencia del cristalino ocular, muy frecuente en el anciano” pues “más de la mitad de los mayores pueden tenerla. Puede presentarse en edades tan tempranas como los 45 años en pacientes con miopía magna, en diabéticos o tras un traumatismo ocular”. Soria apunta que se puede resolver con cirugía (“es una de las cirugías más frecuentes en la actualidad”).

La situación de ojos secos “aparece cuando las lágrimas no pueden lubricar los ojos de forma adecuada. Las lágrimas pueden ser inestables e insuficientes por varias razones. Puede generar visión borrosa además de molestias oculares”. Entre los factores de riesgo para tener los ojos secos está tener una edad mayor de 50 años, ser mujer o una dieta baja en vitamina A.

El glaucoma es el aumento de la presión del líquido intraocular y puede ocasionar daño en el nervio óptico “con afectación progresiva del campo visual periférico seguido por el central. Se puede tratar con fármacos o con láser”.

“Debemos recordar que en el paciente con glaucoma debemos tener precaución con medicamentos que pueden estar contraindicados como fármacos para la enfermedad de Parkinson, algunos antihistamínicos o algunos antidepresivos”, destaca Soria.

También se ha puesto el foco en retinopatía diabética. “Es la afectación del riego de la retina asociada a la diabetes y en particular en aquellos pacientes con mal control diabetológico constituye un riesgo importante de afectación de la visión con múltiples daños a la vascularización de la retina”, señala Soria.

Se puede manifestar con manchas o hebras oscuras que flotan en la vista, visión borrosa u oscura y pérdida de la visión.

El aspecto de la dieta se ha demostrado importante para evitar o paliar muchos de estos problemas.

“Acorde a la Academia Americana de Oftalmología se puede aumentar nuestra ingesta de Vitamina C, Vitamina E o Zinc”, recuerda Soria.

Los alimentos con mucha vitamina C son las naranjas, las toronjas, los kiwis, las fresas, los tomates, los pimientos rojos y verdes y el brócoli.

Las fuentes saludables de vitamina E incluyen almendras, semillas de girasol, aceite de oliva y aguacates.

Las legumbres (alubias y lentejas), las semillas, las carnes, mariscos, los lácteos y los huevos son buenas fuentes de zinc.

Se recomienda también luteína y zeaxantina, “ambos nutrientes se encuentran naturalmente en la retina”. Son parte de la familia de los "carotenoides" de pigmentos vegetales. Los carotenoides dan color a muchas verduras y frutas. “Puede encontrar luteína y zexantina en vegetales de hojas verdes: el brócoli, los espárragos y las frutas de colores como las frambuesas, la papaya, los melocotones y los mangos también tienen abundantes carotenoides saludables para los ojos”, concluye Soria.