¿Y cómo sé yo si esto es una contracción?
Intentamos poner luz sobre uno de los grandes interrogantes del parto
Entrevistamos a la matrona Mirian Sobrino sobre cómo identificar las contracciones
09:48
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1677058488828/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Fuenlabrada
“Las contracciones, suelen ser un gran interrogante para aquellas mujeres que, estando embarazadas de su primer hijo, se acercan a las últimas semanas, previas al parto”, así de claro lo reconoce Mirian Sobrino, sexóloga y matrona en Atención Primaria de la Comunidad de Madrid.
Algunas de las preguntas que en esos días les inquietan son: ¿me enteraré que estoy de parto?, ¿cómo sabré que es una contracción y no otra cosa?, ¿cómo se sienten?, ¿dónde se notan?
“Lo primero que tenemos que saber es que la contracción implica una tensión de un músculo muy potente que es el útero, y va acompañada de una relajación del mismo. Por lo tanto, es algo intermitente, y la mujer, entre otras cosas notara que se le endurece el abdomen, y segundos después se ablanda”, define Sobrino.
Las contracciones, la mayoría de las veces, se perciben como dolorosas, “aunque entrar en esta percepción del dolor es algo muy subjetivo, cada mujer las siente de una manera diferente y en ello influyen muchos factores como el miedo, los significados que hemos dado a esa contracción, o el propio proceso del parto”.
La función de las contracciones es ir abriendo el cuello uterino poco a poco. “Es un trabajo largo, que con el primer bebé puede durar unas 12 horas”, recuerda.
Pero a la hora de identificarlas hay un problema: existen otro tipo contracciones, llamadas de Braxton Hicks, y son contracciones normales, no dolorosas, a pesar de que a veces pueden resultar molestas y no son rítmicas.
“Aparecen a partir de la 20 a 30 semana de embarazo y aumentan en frecuencia e intensidad a medida que nos acercamos a la fecha probable de parto”, define.
Entonces, ¿cómo saber si estamos teniendo contracciones de Braxton-Hicks o contracciones de parto?. “Las contracciones de parto no ceden con el reposo, son dolorosas y van aumentando en intensidad a medida que pasa el tiempo, permaneciendo durante horas”, concluye la matrona.
“Es recomendable que cualquier embarazada acuda a su matrona o al ginecólogo ante la presencia de contracciones que se mantienen durante un mínimo de dos horas, dolorosas, rítmicas, y siempre que no cedan ante el reposo y que se manifiesten antes de la 37 semana de gestación”, señala.