40 años del descubrimiento de la villa romana de Carranque
Charlamos con Samuel López, descubridor de uno de los yacimientos tardoantiguos más importantes del centro peninsular
Entrevistamos a Samuel López Iglesias
Fuenlabrada
Era un 23 de julio de 1983. Sábado. Un joven de 18 años, Samuel López, paseaba por los terrenos que cultivaba su familia en Carranque (Toledo) junto al río Guadarrama. Ya sabía que debajo de aquellos rastrojos y tierras había restos, que a veces salían a la luz al meter el arado: cerámica, muros…
Pero fue algo mucho más pequeño lo que le llamó la atención. En el suelo ocre destacaba el negro de una figura cuadrada, un cubo perfecto. Una tesela. Con sus manos se puso a escarbar hasta dar con un trozo de mosaico algo más grande y luego, ayudado por su hermano, encontró una de las imágenes que hoy los turistas pueden disfrutar en el yacimiento de la Villa romana de Materno.
Cuarenta años después Lopez ha recordado en nuestros micrófonos cómo fue ese día y los avatares que le llevaron a litigar contra la administración para que le reconocieran el 50% del valor de lo encontrado, tal y como recogía la ley.