El consumo de hipnosedantes crece entre los adolescentes y es la cuarta sustancia por detrás del alcohol, el tabaco y el cannabis
El psicólogo del SPANT, Javier Yzquierdo, comenta en la sección 'Punto Omega' cuáles son estos fármacos y cómo están afectando a la sociedad más joven
Aumenta el consumo de hipnosedantes con la sección de Punto Omega
Móstoles
Los hipnosedantes son fármacos que pueden ser muy útiles para la ansiedad, problemas de sueño o como relajantes musculares. Dentro de este grupo hay muchos fármacos distintos, y algunos de los más conocidos son el loracepam, el lexatin, el orfidal o diacepam. Estos fármacos son legales en España, a los que se puede acceder con una receta médica y, a grandes rasgos, su acción sería parecida a la acción relajante del alcohol, ya que actúan sobre los mismos receptores cerebrales.
El psicólogo del Spant, Javier Yzquierdo, comenta que uno de los principales peligros de los hipnosedantes está en su poder adictivo. "Se trata de sustancias con una facilidad tremenda para generar dependencia, especialmente cuando se consumen a diario durante más de 30 días. En nuestro país, es muy habitual el consumo diario para dormir, lo que a largo plazo aumenta enormemente el riesgo de dependencia.
Por otra parte, esta dependencia va acompañada de una enorme tolerancia: cada vez necesitas más dosis para notar los mismos efectos. Como con cualquier otra droga, más dosis implica mayor toxicidad para el cuerpo y mayor dificultad para abandonar el consumo. Además de la adicción, pueden aparecer problemas a corto-medio plazo como mareos, dificultades de concentración o pérdidas de memoria", explica durante la sección Punto Omega en Hoy por Hoy Madrid Oeste.
En 2023, España fue el país del mundo que más hipnosedantes consumió, por delante de países que siempre han encabezado las listas de consumo de sustancias, como EEUU. "En ese mismo año, el 13,1% de las personas entre 18 y 65 años las consumía al menos una vez al año, lo que la sitúa en la tercera sustancia más consumida, por detrás del alcohol y el tabaco. En adolescentes, esta cifra se sitúa en en el 14,8%, siendo la cuarta sustancia por detrás del alcohol, el tabaco y el cannabis", afirma Yzquierdo.
Este consumo se está incrementando anualmente en todos los rangos de edad, incluida la adolescencia, y es el doble en mujeres que en hombres. De hecho, en la edad adulta, es la única sustancia más consumida por mujeres que por hombres. Yzquierdo aconseja que, durante la adolescencia, es esencial hablar con los jóvenes cuando sufran periodos de ansiedad o de estrés y no normalizar el consumo de estas sustancias.
Pueden escuchar la sección "Punto Omega" en esta web y todos los martes a partir de la 13.00 del mediodía.
Laura Álvarez
En Hoy por Hoy Madrid Oeste, anteriormente en...