Infecciones urinarias en los mayores: preguntas y riesgos
Es una de las infecciones más frecuentes y responsables de un cuarto de las hospitalizaciones de la población geriátrica
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Fuenlabrada
“Las infecciones urinarias son infecciones frecuentes en los mayores, de hecho, son responsables del 25% de todas las hospitalizaciones de la población geriátrica”, explica Fran Soria, geriatra del Hospital Universitario 12 de Octubre y Hospital La Luz de Madrid.
Los factores de riesgo están “en muchos casos relacionados con la edad, como lo son la malnutrición, la diabetes mellitus no controlada, el descontrol sobre la vejiga urinaria, estreñimiento, atrofia vaginal, el crecimiento prostático o el, deterioro cognitivo...”
También la presencia de sondas urinarias en pacientes en residencia es un factor de riesgo. “Otros factores en los pacientes en residencia son la demencia o la dependencia funcional, En hombres la presencia de enfermedad neoplásicas es un factor de riesgo”, apunta.
Cursa con molestias urinarias como disuria (“ardor para orinar”), dolor abdominal en el hipogastrio, fiebre y sudoración, mientras que síntomas atípicos son el delirio (“o cuadro confusional agudo”), mareo, náuseas, pérdida de apetito, caídas o incontinencia urinaria y en muchos casos sin fiebre.
El delirium es uno de los síntomas y consecuencias más preocupantes. “El delirium es una entidad multifactorial, si bien está relacionada con mucha frecuencia con infecciones urinarias y respiratorias, así como hospitalizaciones prolongadas. Es importante destacar que el tratamiento antibiótico en los ancianos que no tienen síntomas pueden ser un desencadenante por lo que debemos tener mucho cuidado con el tratamiento indiscriminado”, apunta Soria.
Entre los consejos de prevención están beber líquidos de forma regular, un buen habito miccional es decir acudir a orinar cuando se tiene deseo y no aguantar en exceso, limitar el consumo de alcohol y bebidas con cafeína y “aún se realizan esfuerzos para reunirá evidencia científica respecto a la utilidad e derivados del arándano” o “para sustentar la recomendación de vacuna contra E coli”.
