Alcalá de Henares tendrá su estación de autobuses en el extremo de Vía Complutense

Alcalá de Henares

Se acabó el misterio. La futura estación de autobuses de Alcalá de Henares estará en el extremo oriental de Vía Complutense, en una parcela junto al antiguo Parque Municipal de Servicios. No será, por tanto, un intercambiador comarcal con Cercanías tal y como prometió la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso durante su visita a la ciudad complutense en mayo de 2023 durante la presentación de candidatos de la zona este de la región, o durante el último Consejo de Gobierno celebrado en la ciudad a principios de 2024, cuando aseguró que "tenemos claro que estará en el entorno del centro urbano para facilitar los desplazamientos de los ciudadanos".

Según ha anunciado esta tarde la alcaldesa, Judith Piquet, durante el acto de balance de su primer año de gobierno “Alcalá de Henares tendrá la estación de autobuses que merece". Y ha contado que, en su opinión, "tras numerosas reuniones con la Consejería de Transportes, la opción que en principio parece más acorde a las necesidades de la ciudad es la de una parcela situada junto al Parque Municipal de Servicios".

En su comparecencia, la alcaldesa ha confirmado que “la Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras está ultimando los estudios de viabilidad". Cuando estén listos, habrá que iniciar el periodo de redacción y licitación del proyecto, por lo que no se espera el inicio de obras hasta dentro de varios meses. Para su ejecución será necesario aprobar, antes, un Plan Especial "en el que el departamento de urbanismo ya trabaja”.

Aparcamiento y cafetería

A falta de una presentación específica del proyecto, que aún está por redactar, según ha podido conocer SER Henares, el proyecto contempla la construcción de dársenas en el espacio que ocupa el antiguo edificio del Parque Municipal de Servicios. Los autobuses accederán por Vía Complutense mientras que por la parte de atrás, accediendo por el Camino de la Esgaravita, habrá un aparcamiento para vehículos particulares que permitirán a los usuarios, por ejemplo, acudir en coche y subirse en la cabecera al alguna de las líneas de autobús que se dirige a Madrid o los municipios del entorno.

Además del aparcamiento, la estación contará con taquilla y una zona estancial de espera con cafetería o sistema de venta de comida y bebida. Y asociado a la construcción de la estación, el Consorcio Regional de Transportes contempla que algunas líneas de autobús interurbano realicen paradas en el casco urbano de Alcalá de Henares mejorando de este modo el transporte público del municipio, con un ahorro de costes para el ayuntamiento.

Fin a "una etapa oscura"

La ubicación de la futura estación de autobuses ha sido el principal anuncio de un acto en el que la alcaldesa ha hecho balance de su primer aniversario al frente del Ayuntamiento de Alcalá de Henares. Un año, según Piquet, “duro, largo y complejo, marcado por las dificultades y las zancadillas" que la alcaldesa da por superado “sentando las bases para poner en marcha una ciudad que hemos encontrado paralizada, desorientada, desenfocada”.

La regidora ha llegado a decir que "nos han sorprendido las dificultades tan grandes que hemos encontrado, lo que había en los cajones, lo que había debajo de las alfombras (...) y a partir de ahí comenzar a ver la luz, marcando nuestro propio ritmo, nuestros propios objetivos, poniendo las bases para nuestros propios proyectos que nos planteamos ese 17 de junio, como bien decía Víctor", en alusión al portavoz de VOX, socio de gobierno del PP en el actual gobierno de la ciudad.

El gobierno complutense ha lanzado, para reforzar este mensaje, la campaña 'Alcalá vuelve a sonreir' que, para la alcaldesa, supone pasar “de una gestión personalista a un mando consensuado, del distanciamiento a la escucha activa a los vecinos, de la propaganda a la vocación de servicio público, de propuestas carentes de globalidad a actuaciones rigurosas enmarcadas en un proyecto de ciudad”.

Piquet ha mostrado su convencimiento de que en estos meses hay "una nueva actitud" del gobierno municipal hacia los vecinos y "se han ido solucionando problemas, se han establecido nuevos cauces de comunicación con instituciones, colectivos y vecinos”. Y ha defendido su gestión, reflejada también en reparaciones en calles y plazas, en las zonas verdes, en el mobiliario urbano o en materia de seguridad, y un Plan Especial de Inversión en Distritos con el que promete "mejoras y cuidados para todos los barrios y en el que se van a invertir casi siete millones de euros".

Mucho por hacer

Durante su intervención, Judith Piquet ha reconocido que "Tenemos frente a nosotros una larga lista de desafíos futuros que giran en torno al desarrollo de un planeamiento urbano que equilibre las exigencias de un centro histórico protegido y Patrimonio Mundial, con las necesidades habitacionales, dotacionales, económicas y ambientales que ya existen y las que irán surgiendo en el mañana. Queremos construir una ciudad en la que sea posible completar un ciclo de vida completo, poder residir, poder trabajar, poder formar una familia, poder disfrutar del ocio o poder estudiar entre los puntos cardinales que forman el barrio de Espartales Norte y Ciudad 10, La Garena y el Juncal, Nueva Alcalá y el Barrio Venecia; y Ciudad del Aire y El Val”.

Queda "mucho trabajo por delante", ha concluido, prometiendo que "vamos a trabajador duro por y para" los vecinos.

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