Fernando Valladares, profesor de la URJC e investigador del CSIC: "Hay estudios que demuestran que tenemos nanoplásticos hasta en el cerebro"

Móstoles

Este miércoles se celebra el Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico, un día que tiene como objetivo fomentar el consumo responsable de estas bolsas, además de reducir su uso y concienciar de los peligros de este material para el medio ambiente y la salud humana. "Los plásticos afectan a la salud de las personas, a la salud de los animales que las ingieren e, incluso, a la capacidad de las plantas para absorber los nutrientes del suelo", explica Fernando Valladares, profesor de la Universidad Rey Juan Carlos e Investigador del CSIC durante una entrevista Hoy por Hoy Madrid Oeste.

Hay muchos tipos de plásticos y sus procesos de descomposición son diferentes. Los más duros pueden tardar entre 400 o 500 años y, aunque no hay experimentos que lo demuestren, se piensa que algunos plásticos pueden llegar a estar siglos sin degradarse. Además, estos materiales no desaparecen, su tamaño se va reduciendo paulatinamente, aumentando du peligrosidad y complicando su detección. Los más pequeños son conocidos como nanoplásticos, que son aquellos materiales inferiores a una centésima de milímetro y no son perceptibles al ojo humano. "Hay estudios que demuestran que tenemos este tipo de plásticos incluso en el cerebro. Esto puede provocar inflamaciones o pueden ser asiento para tumores malignos", comenta Vallladares.

Aunque esto, aclara el investigador de CSIC, es una cuestión poco frecuente. El profesor recuerda la importancia de tener conciencia del peligro que pueden provocar para reducir su uso al mínimo imprescindible y reciclar aquellos que sean utilizados para darles una nueva vida. "Creo que el plástico siempre tendrá un papel en nuestras vidas, ha venido para quedarse, pero lo estamos usando lo menos posible y sobre todo los últimos 20 o 30 años. Lo que sí creo, es que debe ir desapareciendo y días internacionales como el de hoy busca, precisamente, que tomemos conciencia de darle un uso más responsable", afirma.

Una de las medidas para proteger el medio ambiente son las bolsas que se hacen de materiales biodegradables. Existen bolsas hechas a raíz de carbohidratos que llegan incluso a deshacerse en el agua y que pueden llegar a reducir significativamente el impacto que los plásticos tienen sobre el planeta y prevenir sus efectos nocivos para la salud humana.