Black Sánchez, el tatuador getafense que triunfa con pintor hiperrealista y ya tiene un cuadro en el MEAM de Barcelona
Su prestigio y clientela como tatuador traspasa fronteras. Pero su arte también se expresa en cuadros hiperrealistas, uno de ellos ya está en el Museo Europeo de Arte Moderno con una obra donde también reivindica el tatuaje
Entrevista a Adrián Sánchez, tatuador de Getafe, también pintor hiperrealista que ya tiene un cuadro en el MEAM de Barcelona.
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Getafe
Adrián Sánchez, Black Sánchez, como es conocido a nivel profesional, tiene su estudio, Chinatow Tatto Madrid, en Getafe, convertido ahora en uno de los referentes del mundo del tatuaje, no sólo a nivel nacional, sino también internacional. Su fama es tal que un cliente vino desde Los Ángeles a tatuarse y cuando abre agenda para dar citas los próximos tres meses, en tan sólo una hora la tiene cubierta. Ha participado en certámenes de tatuaje en diferentes países y ganado premios como el ‘Best of Show” de Nueva York.
Sonríe cuando enumeras sus logros y parece quitarle importancia. Él hace lo que le gusta, lo hace con mimo, disfrutando y su nombre es más que conocido en el mundo del tatuaje. Pero no sólo triunfa ahí, también en la pintura. Cuadros hiperrealistas, de grandes dimensiones, como el del actor Tyrese Gibson, uno de los intérpretes de ‘The Fast and Furious’, quien se puso en contacto con él tras ver su trabajo en redes sociales. Este año se presentó al Certamen que realiza el Museo Europeo de Arte Moderno de Barcelona, el MEAM, y su cuadro se ha quedado allí definitivamente. Llegó a ser finalista entre 2.600 obras de diferentes puntos del mundo. Al final el Museo le dijo que quería contar con su cuadro en la exposición fija.
'Elia' cuadro hiperrealista de Black Sánchez que se puede ver en el Museo Europeo de Arte Moderno de Barcelona. / Black Sánchez
'Elia' cuadro hiperrealista de Black Sánchez que se puede ver en el Museo Europeo de Arte Moderno de Barcelona. / Black Sánchez
La obra de 1,50 x 1,50 se llama ‘Elia’, nombre de la modelo con la que contactó Adrián. Es su rostro pintado con todo detalle. Una cara llena de tatuajes, incluido un tierno “lo siento mamá”. “Buscaba reflejar la ternura y amabilidad que puede representar una persona con tatuajes en la cara, algo que a veces, a algunas personas les echa para atrás”.
Auge de tatuadores y del tatuaje
Adrián asegura que sigue habiendo mucha gente que quiere tatuarse, influyen los famosos que lo hacen, los anuncios con gente tatuada…, pero también asegura que ha aumentado el número de estudios de tatuaje hasta el punto de que asegura que “hay sobre población de tatuadores”.
Aún así, él sigue siendo uno de los más demandados, llegando a tener hasta dos años de lista de espera. Pero como esto le condicionaba su vida personal, cambió la fórmula. Ahora abre agenda en sus redes sociales para citas y en tan sólo una hora la tiene repleta para tres meses.
Sobre las tendencias en tatuaje, Adrián, explica que sobre todo tatúa leones, tigres o lobos, aunque también funcionan muy bien los relojes, brújulas y mapas. Los zombies nunca desaparecen de las peticiones, pero no son tan habituales como pudiéramos pensar. “Ayer hice un retraso de un perro, pero hago de todo, y de cada cinco o seis hago un zombie, aunque en redes sociales parezca que estoy enfocado a esa línea, pero no”, afirma. Lo más curioso que le han pedido: un tatuaje de Eduardo Punset comiendo un sándwich.
