Madrid

El oficio de Roberto Bonacini es fundamental en una película de acción. Es el que dobla al protagonista, en las escenas arriesgadas. Lleva catorce años trabajando en el cine "empiezas haciendo tus pinitos como puedes, yo aprendí haciendo, tuve mis pequeños espectáculos y siempre lo combiné con combate escénico; hace más de veinte años peleaba ya en distintos espectáculos" explica con una voz profunda y segura. Dada su versatilidad, las producciones le han llamado como actor, otras como especialista y otras como coreógrafo, "según lo que requiera el director, hago una cosa o la otra", añade.

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"¡Cómo que tutús!"

Es raro hablar de coreografía cuando no hay tutús ni mallas de por medio - Bonacini se indigna con humor, cuando se mencionan esas partes del vestuario de una bailarina - pero al fin y al cabo hay unos movimientos que realizar para que el combate entre rivales, la pelea entre gladiadores, o la lucha encarnizada en el campo de batalla sea lo más real y estética posibles. "Hace más de siete años que me dedico sólo a la coreografía, y lo que hago es preparar a los actores, ensayar todo el tiempo que pueda, porque es fundamental, desarrollar con ellos su personaje dentro de la acción, y asistir tanto al director como a los actores dentro del set de rodaje. En el cine, no importa si uno se equivoca, porque se vuelve a repetir. Otra cosa es el teatro".

Tom Cruise

Los especialistas están siempre en el set de rodaje: "trabajamos mucho antes que empiece el rodaje, con los actores para preparar las secuencias". Al parecer, lo ideal es poder estar con ellos dos y tres meses antes: "no siempre lo conseguimos. Eso se da sólo en las grandes producciones internacionales. En España, si los actores se pueden preparar la escena quince días antes, estamos de suerte, es muy importante la concentración y el trabajo previo". No todos los actores tienen las mismas capacidades ni todas las productoras tienen el presupuesto necesario para la formación de los actores. "Yo no soy partidario de que los actores realicen las secuencias de riesgo. Cuando el bueno de Tom (Cruise), hace la escena y todo sale bien, estupendo. Pero si no, puede poner en riesgo toda la película durante dos meses o más." Los especialistas están para eso, explica Bonacini, para que la producción no se pare.