Silent Hill 2, el mayor terror psicológico renovado audiovisualmente

Fuenlabrada

No exagero si os cuento que algunos de los títulos de la saga Silent Hill son realmente duros de jugar por su ambientación tenebrosa. Sí, hasta el punto de tener que disfrutarlos en sesiones no muy largas para garantizar que el corazón no se nos sale por la boca con tanta tensión. Y lo digo por experiencia propia… sin embargo su magnetismo es tal que vuelves una y otra vez a esa ciudad inundada por la niebla, aunque sepas que lo vas a pasar mal… porque también eres consciente de que disfrutarás enormemente sobreviviendo.

El segundo capítulo de la saga, Silent Hill 2, llega ahora reconstruido desde cero y con grandes mejores audiovisuales para PS5 y PC. ¿Por qué no la primera parte para empezar por el principio? Pues es una gran pregunta que solo puede contestar su editora, Konami, pero es muy posible que hayan querido apostar sobre seguro ante el gran éxito de la segunda parte allá por 2001. El estudio encargado de este nuevo lanzamiento es Bloober Team, responsables del meritorio The Medium, cuya oscura ambientación seguro que contribuyó a decantar la balanza a su favor a la hora de seleccionar desarrolladores. Afortunadamente en el apartado sonoro se ha mantenido al maestro Akira Yamaoka, que ha regrabado la increíble banda sonora original (de verdad, escuchadla si os gusta el rock) incluyendo nuevas pistas orquestales y nuevos temas.

En Silent Hill 2 tomamos el control de James, un hombre que acude al misterioso pueblo de Silent Hill después de recibir una carta de su esposa. El dato macabro es que su mujer falleció hace años. Al llegar allí se encuentra con una mujer extrañamente parecida a ella que parece saber mucho de él… y esto es solo el principio de una serie de encuentros y experiencias infernales que le sumirán ¿al borde? de la locura. Esta nueva versión respeta enormemente la historia original, con muchos diálogos prácticamente calcados.

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Esta revisión del segundo capítulo de la saga presenta otras novedades interesantes como la cámara sobre el hombro del protagonista -más cercana que en el original- el pueblo de Silent Hill es más grande (también sus zonas como la prisión) y ahora podemos acceder a edificios que antaño estaban cerrados a cal y canto. Evidentemente -para perjuicio de nuestra salud cardíaca- el título es más inmersivo por el mayor realismo visual y la mejora de la ambientación sonora, que ahora es más envolvente. Hablamos de terror psicológico: miedo a lo que no vemos, por lo que los crujidos, gritos lejanos y la tensión ambiental juegan un papel fundamental, así como ángulos de cámara malévolamente elegidos. El juego sigue siendo oscuro, pero ahora la iluminación de nuestra pequeña linterna es mucho más realista, así como los reflejos en diferentes superficies y los efectos de la niebla.

Hablar de Silent Hill es hablar de criaturas oscuras y surrealistas. Desde entidades amorfas a enfermeras sin rostro que no buscan curarnos sino todo lo contrario. En este Silent Hill 2 hay más enemigos y combates que en el original, y la lucha también es más ágil y precisa, pero no se hace excesiva porque no podremos pelear contra todo, habrá que seleccionar. Ahora contamos con el sistema de apuntado del que carecía el original (provocando fallos hilarantes y letales) y James también puede esquivar ataques cuerpo a cuerpo. Tanto el movimiento como el uso de objetos curativos del menú es más ágil, lo que hace todo más suave y aminora esa sensación de estar ‘vendidos’ que teníamos en el original. Los enemigos son más inteligentes, buscan esconderse y contraatacar, por ejemplo, y no faltan enemigos finales (como el legendario cabeza-pirámide) con nuevas mecánicas y enfrentamientos más largos.

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Meridiem es la distribuidora encargada de traer la deseadísima versión física de Silent Hill 2 a España. Cuenta con portada reversible con la ilustración original y la nueva, y las primeras copias también incluyen un pin de regalo con una simpática enfermera ensangrentada de cabeza oscilante en miniatura. Una gran presentación para una aventura que nos hará pasar miedo (mucho) durante 18-20 horas, y que añade tres nuevos finales a los cinco que ya conocíamos.

Diablo IV: Vessel of Hatred

Este 8 de octubre llegaba la primera expansión para Diablo IV llamada ‘Vessel of Hatred’ (PC, PS5/PS4, Xbox Series/One). En nuestras primeras incursiones ya hemos podido visitar la nueva zona de las selvas y el río de Nahantu buscando a la mortal Neyrelle, que está en el punto de mira del demonio mayor Mefisto (atrapado en una piedra de alma pero no inerte) sufriendo todo tipo de maldiciones. Lo ideal es completar la campaña principal para zambullirnos en esta expansión, pero podemos saltar directamente a Nahantu completando solo el prólogo inicial del juego.

En cualquier caso va a ser todo un desafío sobrevivir a innumerables hordas de demonios; por suerte ahora contamos con la nueva clase ‘Espiritualista’, capaz de invocar animales espirituales como leones, águilas, gusanos gigantes o gorilas para devastar a los enemigos. Se trata de una clase inédita en la saga y bastante bien equilibrada con capacidad destructiva a todas las distancias.

Esta expansión incluye la vuelta de los mercenarios como personajes de apoyo con árboles de habilidad propio, la mazmorra ‘Ciudadela Oscura’ pensada para ser desafiada en compañía y la mazmorra ‘Infraciudad de Kurast‘ para poder subir de nivel a nuestros personajes mediante oleadas cronometradas. Como extra, con esta actualización todos los jugadores de Diablo IV (con y sin la expansión) disfrutarán de añadidos como el aumento hasta el 60 del nivel máximo, un nuevo sistema de dificultad, nuevas habilidades para todas las clases, cambios en la calidad de los objetos y dos casillas más de personaje. Hasta aquí el SER Jugones de esta semana, pasadlo bien.