Prevención, clave para evitar úlceras en personas con movilidad reducida
La hidratación pero evitando la humedad excesiva son dos de los consejos ante estas lesiones
Entrevistamos a Juanjo Andrés Lencina, dermatólogo y director médico de laboratorios Ozoaqua
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Fuenlabrada
Nuestro ‘Curarse en Salud’ de esta semana se fija en el Día Mundial de las Úlceras por Presión (19 de noviembre) para hablar de prevención y cuidado de estas heridas.
Juanjo Andrés Lencina, dermatólogo y director médico de laboratorios Ozoaqua, nos ha explicado las claves para evitar estas lesiones, muy comunes en las personas con movilidad reducida.
“Las úlceras por presión son un problema serio, y suelen aparecer en personas que pasan mucho tiempo en una misma posición, como pacientes encamados o con movilidad reducida”, explica. Entre los factores que predisponen incluyen la presión constante sobre zonas óseas, la fricción y la humedad excesiva, que puede debilitar la barrera cutánea. “Además, la falta de oxigenación y la escasa circulación en ciertas áreas aumentan el riesgo de desarrollar estas lesiones”, apunta el dermatólogo.
Entre las recomendaciones están “la movilización frecuente, al menos cada dos horas, para evitar la presión constante en las mismas zonas. La hidratación de la piel es esencial para mantener la barrera cutánea en buenas condiciones; en este sentido, los aceites ozonizados pueden ser muy efectivos, ya que ayudan a regenerar y fortalecer la piel, protegiéndola de la fricción y evitando la sequedad. También es importante mantener la piel limpia y seca, sobre todo en personas con incontinencia, para reducir la humedad que favorece la formación de úlceras”.
Sobre los aceites ozonidados, “tienen propiedades regeneradoras y antibacterianas, lo que los hace ideales para proteger la piel vulnerable. Aplicarlos regularmente en áreas propensas a la presión puede ayudar a reforzar la barrera cutánea y mejorar la microcirculación, lo cual es clave para mantener la piel en buen estado. Además, su acción antiinflamatoria contribuye a reducir el riesgo de infecciones y a calmar la piel enrojecida o irritada”.