Cánticos franquistas y brazos en alto en las aulas de Madrid: una profesora explica cómo frenar el discurso ultra entre adolescentes
Cristina Luz García, profesora y doctora en en Historia Contemporánea, iba a participar como ponente en el curso cancelado por la Comunidad de Madrid

Cánticos fascistas en las escuelas de Madrid: "Hay pintadas en mesas, gritos por los pasillos o en clase, saludos con el brazo en alto..."
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Madrid
La suspensión del curso 'Abordar el franquismo y la memoria democrática en las aulas' por parte de la Comunidad de Madrid ha dejado perplejos a algunos docentes como Cristina Luz García, que iba participar como ponente en el mismo y ha estado este jueves en una entrevista en La Ventana de Madrid.
García, profesora de un instituto público en la Comunidad y doctora en Historia Contemporánea, cuenta que los maestros notan en las clases ese acercamiento de los adolescentes a posturas de extrema derecha y que se enfrentan "a una involución en las ideas democráticas de algunos alumnos y a la exaltación de algunas figuras del pasado" que regían dictaduras fascistas: "Hay pintadas en mesas, gritos por los pasillos o en clase, saludos con el brazo en alto...". Además, cree que "el problema es que gran parte de ellos repiten consignas que escucha en las redes sociales".
"Los profesores lo que tenemos que hacer, desde la tranquilidad, es enfrentar este tipo de cuestiones", explica García, que considera que los alumnos "no tienen un conocimiento muy profundo sobre el tema" por la edad que tienen y es importante que vean la escuela como "un espacio seguro" en el que hablar sobre el tema para poder "rebatirles con un discurso historiográfico".
Este curso iba dirigido a que los profesores tuviesen herramientas para afrontar estas "ideas preconcebidas de los alumnos", que dice la profesora que vienen "desde hace 5 ó 6 años". Reconoce que la suspensión del curso ha sido inesperada porque estaba "ya aprobado" e "incluso tenía inscritos", pero la nueva directora general de Bilingüismo y Calidad de la Enseñanza consideró que este no estaba dentro de las líneas prioritarias de la Comunidad de Madrid. Aun así, tampoco les han dado ningún tipo de explicación directa, señala García.




