Sanción de 45.000 euros por almacenar estiércol en suelo permeable cerca del embalse de Pedrezuela

Pedrezuela

Hace casi un año, la Plataforma Ecologista Madrileña denunció ante diversas administraciones y servicios de la Comunidad de Madrid el almacenamiento de grandes cantidades de estiércol en suelo permeable de la zona de Pedrezuela. Esta práctica, explican, constituye un importante riesgo de contaminación por nitratos de las aguas subterráneas, de los suelos y de las masas de agua cercanas. La denuncia derivó en un expediente disciplinario contra el titular de la planta de tratamiento de residuos que proponía una sanción de 30.000 euros, que fue ampliada por la resolución final de la Dirección General de Biodiversidad hasta los 45.000 euros por infracción administrativa grave.

El portavoz de la plataforma, de la organización ecologista El Soto, Antonio Martínez, denuncia que de forma concreta estos residuos podrían afectar al agua almacenada en el cercano embalse de Pedrezuela, que forma parte de la red de abastecimiento de agua del Canal de Isabel II. Recuerda además que los suelos afectados pertenecen a la Red Natura 2000, que excluye este tipo de almacenamientos por los riesgos indirectos que supone a los hábitats y especies protegidas.

Los ecologistas recuerdan el Código de Buenas Prácticas Agrarias o el Reglamento del Parlamento Europeo que establece las normas sanitarias aplicables, en los que se considera ‘el estiércol’ como uno de los residuos más potencialmente peligrosos.

Esta es una de las numerosas denuncias que la Plataforma Ecologista Madrileña lleva realizando durante años sobre la situación del valle del río Guadalix que, alertan, está afectado por los vertidos procedentes de la actividad agroganadera de la zona de Miraflores de la Sierra y Pedrezuela. Los ecologistas recuerdan la denuncia por balsas de purines ganaderos en la zona de Miraflores de la Sierra con la que recurrieron al Defensor del Pueblo para que la Consejería de Medio Ambiente respondiera. Afirman que, 19 meses después de la denuncia, las autoridades regionales dijeron que no habían podido localizarlas.

La plataforma ha vuelto a exigir a las administraciones mayor compromiso con la conservación de este ecosistema fluvial, así como el más elemental rigor en la aplicación de las normativas de disciplina ambiental.