Una asociación vecinal de Madrid, en peligro tras ser adquirido su local por un grupo inmobiliario: "Sólo quedamos nosotras y tienen prisa por desalojarnos"

Madrid

El Espacio Bellas Vistas abrió sus puertas en 2020 a escasos metros de la Glorieta de Cuatro Caminos. Pronto se convirtió en un punto de encuentro entre vecinas y vecinos de todas las edades y procedencias. Allí se celebran actividades culturales, se teje en grupo, se realizan talleres y mercadillos de artesanía, se imparten clases gratuitas de apoyo escolar, los mayores del barrio leen cuantos a los niños, que tienen reservada la tarde de los lunes para jugar entre libros. También por la calle Almansa número 22 han pasado especialistas de todo tipo para dar charlas y se generan debates sobre cuestiones del barrio, mientras el grupo de consumo recoge sus verduras y frutas cada semana. Un espacio vivo que puede morir.

"Somos un espacio vecinal autogestionado por las vecinas y desde que el local en el que nos reunimos fue adquirido por un grupo inmobiliario en 2023 nos han estado presionando para que dejemos ese local", resume Susana Dobado, portavoz del Espacio Bellas Vistas, en Hoy por Hoy Madrid. Explica además que los actuales dueños adquirieron todo el edificio y fueron convenciendo a los distintos inquilinos que vivían allí para que se fueran yendo: "Ahora sólo quedamos nosotras y tienen prisa por desalojarnos lo antes posible para poder realizar sus obras y dedicar el edificio a a su actividad económica".

El contrato de alquiler está vigente hasta mayo del año que viene pero los propietarios apremian a la asociación para que se vaya cuanto antes. Las vecinas han comenzado a buscar espacios alternativos pero se encuentran con el mismo problema: "El barrio está en plena transformación, como todo Madrid y como todas las ciudades grandes. Todos los bajos de los edificios, los locales, se están convirtiendo en apartamentos turísticos o de larga estancia. Incluso hay infraviviendas en locales sin reformar". Precisamente, la zona de implantación del Plan Reside —que prohíbe que haya pisos turísticos en edificios residenciales— llega hasta Cuatro Caminos y sus calles se están transformando por completo: "Los inversores están aprovechando todos los negocios que van cerrando para convertirlos en viviendas. Así que no tenemos a dónde irnos. Está siendo muy difícil encontrar un local con un tamaño adecuado, un precio razonable, teniendo en cuenta que nos financiamos con aportaciones voluntarias de las personas asociadas".

Desde el Espacio Bellas Vistas saben que solo son un caso más: "Hay vecinas que ya se están yendo del barrio al no poder asumir los incrementos del alquiler, que en algunos casos llegan hasta el 40%. La diferencia es que nosotras, como asociación vecinal, tenemos nuestro lugar aquí. Nuestra actividad o nuestra existencia no tiene sentido en otro sitio. Quieren transformar nuestros barrios en otra cosa", sentencia Susana.