Valencia CF: Acuerdo cerrado con Gennaro Gattuso y Jorge Mendes insiste a Peter Lim en ponerle al italiano un parapeto en el club

València

Habrá que esperar a la desvinculación de Bordalás para el anuncio oficial, pero lo cierto es que en el Valencia ya se da por hecha la llegada del que será nuevo entrenador, Gennaro Gattuso. Después de las reuniones en Singapur con el máximo accionista, el entrenador italiano ya prepara su desembarco en la Ciudad Deportiva de Paterna.

Como ayer informó la Cadena SER, Gattuso disponía de información interna de la SAD facilitada por Meriton, con quien se reunió los meses de abril y mayo en Milán y Marbella. También conocía la hoja de ruta en Mestalla, que pasa por las ventas de varios jugadores importantes en las próximas semanas. Siguen apareciendo de forma incesante nombres de jugadores para el Valencia 22/23, pero la única realidad es la obligación de venta neta por37'7 millones de euros establecida en el presupuesto y la imposibilidad de voltear el Fair Play Financiero incluso con una hipotética inversión de Lim este verano. De todo ello se ha hablado en las últimas horas en Singapur. Y tras esas conversaciones el acuerdo verbal entre las partes está cerrado.

Pero Mendes no acaba de estar tranquilo con la situación en la que puede quedar Gattuso en el Valencia. Es consciente de la dificultad del momento y lleva tiempo insistiéndole a Lim en la conveniencia de colocar un ejecutivo deportivo de primer nivel que le haga de parapeto y reduzca la exposición y el desgaste a la que han estado sometidos, por ejemplo, Javi Gracia o José Bordalás. Dos nombres que Mendes ha puesto sobre la mesa de Lim son Ramón Planes y Braulio Vázquez.

Lo que no sabemos si Mendes habrá puesto también es algo del sentido común que le falta al máximo accionista del Valencia en su toma de decisiones desde 2014. Lo lógico hubiera sido empezar el edificio por los cimientos y firmar ese ejecutivo deportivo de primer nivel y con experiencia antes de poner un entrenador.

¿Qué sentido tiene llamar a la puerta de una dirección deportiva de prestigio para que se encargue del club si la decisión más importante que puede tomar un director deportivo ya está tomada? ¿Va a cambiar Braulio Vázquez cuatro años garantizados y la estabilidad de Osasuna por este polvorín? ¿Va a dejar plantado Ramón Planes a Ricardo Barkala y su proyecto para el Athletic viniendo a trabajar con un técnico que ya ha puesto otro? Podría ser, porque el Valencia siempre tiene gancho. Pero no es la mejor manera de seducir a un profesional al máximo nivel.