La Batalla de Flores de València: una inyección de oxígeno para un sector lleno de incertidumbre sobre el futuro

València

Tres años después, este domingo vuelve a València la tradicional batalla de flores, con casi 1.700.000 clavelones, que llenan de color la Alameda de la ciudad. Una celebración que viveristas y floristas de toda la Comunitat Valenciana han visto como una inyección de oxígeno tras unos meses bastante complicados en lo que a ventas y producción se refiere. El encarecimiento de los costes y la bajada del consumo les ha hecho perder rentabilidad, y temen que este otoño sea peor.

Eduadro Martí, de la asociación de viveristas de la Comunitat Valenciana, reconoce que 2020 y 2021 fueron mejor de lo que esperaban, porque se vendió todo lo cultivado, aunque ve con incertidumbre el futuro. Ya han notado un descenso en la venta de plantas y teme que se mantenga en los próximos meses.

Alertan del cierre de floristerías

Y Paco Montañana, de Mercaflor, alerta del cierre de floristerías. Detalla que la inflación les afecta especialmente porque muchos de los invernaderos en los que se cultivan las plantas funcionan mediante gas y con la reducción del consumo muchos agricultores decidieron cambiar sus cosechas de plantas ornamentales por hortalizas, perjudicando así a las floristerías.

Aún así, Montañana cree que la batalla de flores de València es una oportunidad para demostrar la fortaleza de todo el sector en la Comunitat Valenciana.