Compromís quiere aplicar la tasa turística a todo el sector en València, mientras que el PSPV pide hacer un "uso inteligente" del impuesto

València

El vicealcalde y concejal de Ecología Urbana, Sergi Campillo, de Compromís, defiende que se aplique la tasa turística en la ciudad de València a todas las pernoctaciones, una vez se recuperen los niveles de visitantes previos a la pandemia de la Covid-19. Esas eran, según dice, las directrices del acuerdo firmado por los tres grupos de gobierno en la proposición de ley que se debate en Les Corts.

El vicealcalde explica que nunca se habló de una "tasa turística parcial", como defiende el PSPV, sino que se habló de aplicar la tasa turística "a todas las actividades que conlleven la pernoctación en la ciudad de València". Es decir, no solo a los cruceros y a los alojamientos turísticos.

El concejal cree que, igual que todos los vecinos pagan el IBI, los visitantes deben pagar también su contribución a la capital, que cifra de uno a tres euros, para el mantenimiento de servicios urbanos como la limpieza o la seguridad en las calles. En este sentido, Campillo apunta a que la aplicación de esta tasa podría producirse en 2024.

Campillo asegura que en Europa "lo raro es no tener tasa turística" actualmente, por lo que, para su partido político, aplicarla en la ciudad "es una cuestión de prestigio y de justicia". Y, por ello, mantiene que Compromís no se va a mover del acuerdo "ni en una coma".

Sanjuán acusa al vicealcalde de "no comprender" la propuesta

No obstante, el concejal de Hacienda, Borja Sanjuán, cree que Campillo "no se ha leído o no ha entendido bien el texto de esa norma" que se debate en Les Corts y que aún no se ha aprobado de manera definitiva. Recuerda, además, que lo que se dice es que la Generalitat bonificará el cien por cien de esa tasa y que son los ayuntamientos los que tienen la potestad para aplicarla.

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Así, Sanjuán explica que los socialistas quieren hacer un "uso inteligente" de la tasa, gravando aquellas actividades que más contaminan y menos actividad económica generan, como son los cruceros, y los que puedan tener un impacto negativo sobre los precios del alquiler, como son los apartamentos turísticos. "La tasa no pretende acabar con el turismo, sino hacer que tenga un mejor impacto en la ciudad", acaba.