Alicante

Alicante es la provincia de la Comunitat Valenciana donde más han crecido los homicidios dolosos y los asesinatos durante la primera mitad de 2022. De hecho, casi se han triplicado con respecto al mismo período del año anterior, creciendo un 266 %. Porcentaje alarmante si se compara con Valencia, provincia donde han aumentado un 9 %, o Castellón, que se mantiene en las mismas cifras de 2021. Son datos del balance de criminalidad del Ministerio del Interior.

Según las estadísticas del Gobierno, los homicidios y asesinatos consumados en Alicante, han pasado de tres en 2021 a ocho en 2022. Un incremento de este tipo de delitos que llama la atención ya que, en Valencia, solo se produce una muerte más que el pasado año, mientras que en Castellón se queda en los mismos dos fallecidos del pasado año, por este tipo de delitos.

También llama la atención el caso de los homicidios o asesinatos no consumados, que se mantienen en los 21 delitos en Alicante, cuando en Valencia, por ejemplo, se redujo esa cifra de 32 casos a 26, es decir, un descenso del 19 %.

La provincia de Alicante tiene además el triste honor de ser la única de las tres provincias en la que no desciende ninguno de los tipos de delitos analizados por el balance de criminalidad del Ministerio, en comparación con los mismos datos de la primera mitad de 2021.

Eso sí, como consuelo, no demasiado esperanzador, el dato sobre el total de infracciones penales. Se ha incrementado en las tres provincias. En Alicante, un 25 %, en Valencia un 26, y en Castellón un 15 %.

Posibles motivos

La pregunta es: ¿se ha incrementado la delincuencia en nuestra autonomía y, especialmente, en nuestra provincia o, simplemente, se ha mejorado la actuación policial y es más efectiva?

Según el coronel de la Guardia Civil y jefe de la Comandancia de Alicante, José Hernández Mosquera, que esta semana pasaba por los micrófonos de Hoy por Hoy Alicante, existen una gran variedad de causas. Pero destaca, como ocurre en el caso de los delitos sexuales, una mayor concienciación ciudadana, que incrementa el número de denuncias de delitos que antes pasaban inadvertidos, además de una mejor labor y coordinación policial.

Además, los delitos que más preocupan a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado son, sobre todo, los cometidos contra personas vulnerables.

En cualquier caso, aunque las cifras de criminalidad no son muy elevadas, Mosquera destaca que hay que trabajar también por mejorar la seguridad subjetiva de la ciudadanía, es decir, su sensación de estar en un lugar seguro para vivir.