Las toallitas desechables siguen siendo un problema para las aguas residuales

València

Las toallitas higiénicas siguen siendo un problema para la red de saneamiento de València, ya que la ciudadanía continúa echando a los inodoros estos productos, que taponan las tuberías y pueden llegar a bloquear los colectores. El Ciclo Integral del Agua gasta cada año más de diez millones de euros en el mantenimiento de toda la red (que asciende a 14 millones de euros si se suman las instalaciones electromecánicas) y, según su responsable, Elisa Valía, la cantidad podría ser mucho menor si no se tuvieran que retirar tantos kilos cada año de toallitas y otros productos desechables.

El Ayuntamiento lleva años intentando que la gente no tire las toallitas, ni cualquier cosa que no sea papel higiénico, al inodoro ya que provocan bloqueos en los imbornales. En el año 2019, por ejemplo, un atasco de 3,5 kilómetros de toallitas en el colector norte de la ciudad provocó que se tuvieran que retirar más de 6 toneladas de este producto. En el año 2014 también hubo otro atasco que obligó a retirar también tres toneladas más de toallitas.

Elisa Valía destaca que ahora mismo ese problema ya no existe. Pero no es porque la gente esté concienciada y no tire toallitas, sino porque se ha invertido mucho dinero en la modernización de la red y cada año se refuerza el manteimiento en los puntos donde se suelen acumular las toallitas.

Valía señala que una de las caratcterísticas de la ciudad de València es que es muy plana, y eso dificulta el funcionamiento normal de la red de saneamiento ya que hay muchos puntos que no tienen la pendiente necesaria para que el agua fluya de forma correcta. Es en esos puntos donde se refuerza el mantenimiento, ya que son mas propensos a sufrir atascos. Otro problema es el de la falta de lluvia que hay en la ciudad, y que impide que el agua que debería caer en las alcantarillas y limpiar los imbornales lo haga.

Desechos de todo tipo

Valía insiste en que se podría ahorrar mucho dinero cada año si la ciudadanía estuviera concienciada en el tema. Y es que no solo son toallitas, sino que los técnicos han llegado a encontrar desechos de todo tipo en los imbornales de la ciudad. Incluso apareció el cadáver de un caballo proviniente, seguramente, de una acequia. La concejala de ciclo integral del agua afirma que es muy importante seguir trabajando en la concienciación, y detalla que el consejo es no tirar nada al inodoro que no sea papel higiénico.

Una de las cosas que, según Valía, más ayudan a que las toallitas no se conviertan en un problema como hace unos años y bloqueen los colectores es la modernización de la red de saneamiento de València que se ha producido durante los últimos años y ha permitido mejorar la calidad de las tuberías. La concejala destaca además que el equipo de Ciclo Integral del Agua trabaja desde hace unos años con una visión medioambiental, con campañas como la de "El mar empieza aquí", que pretende concienciar sobre la necesidad de no desperdiciar agua y tampoco contaminar en exceso el agua.