El avispero que ha agitado el bipartito apunta sus aguijones directamente contra Barcala

Alicante

Sin entrar en el fondo del asunto, es un resbalón y más en estos tiempos electorales que el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante le mande un escrito a la Generalitat quejándose de que la gratuidad del transporte público interurbano para menores de 31 años es un perjuicio económico para el operador que gestiona el autobús en el término municipal de Alicante. E incluso, amenaza con "la suspensión de los tráficos interurbanos coincidentes con los urbanos".

El equipo de gobierno estaba en su derecho de no aplicar la gratuidad a los menores de 31 años, pero remitir este escrito en estos términos es agitar un avispero que ahora centra sus dardos en el alcalde Barcala y candidato popular.

Y entrando en el fondo del asunto, el consistorio se comporta como el "primo de Zumosol" de las concesionarias. Que, por cierto, en los dos casos es la misma y que no ha dicho esta boca es mía. Y, además, en esa disyuntiva, se lo ponen fácil a toda la oposición: entre defender a los jóvenes o a la concesionaría, el PP se ha quedado con lo segundo.

Casi siempre las elecciones se pierden y no se ganan y los populares se están esforzando por mostrar sus flancos más débiles a las formaciones de izquierda.