El PSPV denuncia que privatizar la Marina de València supone renunciar a un centro de innovación tecnológica en la ciudad

València

El PSPV alerta que privatizar la Marina de València supone perder la oportunidad para crear un gran centro de innovación tecnológica en la ciudad. Los socialistas han anunciado que van a presentar una moción al próximo pleno municipal para tratar de frenar esa cesión a la Autoridad Portuaria para que lo privatice. Su portavoz, Sandra Gómez, lamenta que la alcaldesa "haya renunciado a gestionar un espacio único de la ciudad" y haya preferido "entregarlo a manos ajenas".

Gómez reivindica el trabajo hecho por el consell y el ayuntamiento en los últimos ocho años para resolver "el desastre administrativo" que, según ella, se heredó del PP tras la construcción de la marina para la copa américa. Califica su privatización de "intolerable y humillante" para los valencianos y defiende que este entorno se había convertido en un centro tecnológico de primer nivel.

Gómez denuncia que con esta medida, la Marina "se va a quedar en manos de una empresa privada y no sabemos con qué propósito ni objetivo concretos" pero, ha apuntado,"seguro que estará muy alejado a los principios que nosotros estábamos desarrollando de sostenibilidad, de participación o de desarrollo innovador".

Así, la portavoz socialista ha reiterado que el acuerdo que suscribía este martes Catalá junto con la presidenta del Puerto de València "supone una derrota histórica porque supone renunciar al gobierno y a la gestión de uno de los espacios más importantes" y porque "supone la privatización de más de 275.000 metros cuadrados espacio que hoy estaba bajo la tutela del Ayuntamiento de València". Ha explicado que esto "nos había permitido atraer inversiones, empresas de innovación y abrirlo a la ciudadanía".

"Perdemos una gran oportunidad"

Además, ha resaltado que otra de las consecuencias de la renuncia de Catalá a gestionar La Marina es que "también perdemos la última oportunidad que le quedaba al Ayuntamiento de València de poder generar un clúster tecnológico, después de la renuncia de Catalá a desarrollar Vara de Quart y el PAI del Grao". "Solo nos quedaba La Marina para que València formara parte de las ciudades tecnológicas e innovadoras que generaran riqueza, actividad económica y empleo de calidad", ha valorado.

Sandra Gómez ha insistido en que era el “único espacio” que quedaba en la ciudad para "desarrollar un ecosistema innovador y con la renuncia y privatización que se ha hecho de este gran enclave, la ciudad de València pierde el último espacio que quedaba para desarrollar innovación y talento".